Demasiado joven para morir, publicado por la editorial Kliczowski, es una ventana por la que pasan celebridades de la política, la música, los espectáculos, la literatura y el deporte, cuyo denominador común es la vida breve. Vidas en ocasiones intensas y atormentadas como la de la Princesa Diana, muerta a los 36 años en un accidente automovilístico, ocurrido el 31 de agosto de 1997 en el Túnel de las Almas, en París, mientras huía de los paparazzi; publica MILENIO.
El libro cuenta 70 historias de personajes que acaso llegaron a los 50 años, como Michael Jackson, Joe Strummer o el diseñador Gianni Versace. La mayoría murió antes de los 30, como Janis Joplin, Jimi Hendrix y Jim Morrison, fundadores del fatídico club de los 27. O como Buddy Holly, muerto el 3 de febrero de 1959 a los 22 años, en un accidente de aviación en el que también fallecieron The Big Bopper, de 28, y Ritchie Valens, de 17.
En este singular salón de la fama se encuentran Brian Jones, Jean-Michel Basquiat, Ernesto el Che Guevara y Eva Perón, personajes que marcaron una época y, en ocasiones, definieron el rumbo de las décadas siguientes. Están asimismo ídolos como Bruce Lee, el actor y genio de las artes marciales que murió a los 32 años y su hijo Brandon Lee, muerto accidentalmente el 31 de marzo de 1993 durante el rodaje de la película El cuervo.
Este obituario presenta esbozos biográficos y explica las causas de la muerte de los personajes; habla asimismo de su legado, que en el caso del canadiense Terry Fox, es su enorme valentía. Enfermo de cáncer en los huesos, perdió una pierna en 1977; tres años más tarde, recorrió a pie su país para recolectar fondos para la investigación contra la enfermedad que finalmente lo llevaría a la muerte el 28 de junio de 1981, a los 22 años.
John F. Kennedy murió asesinado a los 46 años; Martin Luther King Jr. y Malcolm X, también asesinados, a los 39; Ana Frank, víctima de un campo de concentración nazi, a los 15, y Yuri Gagarin a los 34, mientras hacía un vuelo de rutina en un avión MIG-15, en los alrededores de Moscú. Gagarin fue el primer hombre en viajar al espacio. El 12 de abril de 1961 le dio una vuelta a la Tierra en 1 hora y 48 minutos. Ese día entró a la historia.
El escritor sueco Stieg Larsson, el corredor brasileño de Fórmula I Ayrton Senna da Silva, el activista irlandés Bobby Sands, son otros de los héroes de este libro que se lee como una colección de postales en la que también se cuenta la historia de Florence Griffith, “la mujer más rápida del mundo”, la velocista estadunidense ganadora de tres medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Seúl en 1988, quien murió a los 38 años, el 21 de septiembre de 1998.
Demasiado joven para morir es una galería de elegidos, “sus muertes sacudieron al mundo entero” y su recuerdo no solo permanece sino que se acrecienta con el tiempo.
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