BBVA México, una posible reducción en el flujo monetario de las remesas, originado por las nuevas políticas migratorias que podría implementar Donald Trump en Estados Unidos, tendría efectos marginales en la economía mexicana; publica MILENIO.
Asimismo, destacó que estos ingresos son una fuente muy importante de ingresos de divisas para América Latina y el Caribe.
En la región hay varios países que tienen alta dependencia hacia las remesas, medido como su proporción respecto del Producto Interno Bruto (PIB) en 2024.
La firma financiera, con información del Banco Mundial, señaló que se prevé que durante 2024 las remesas representaron 3.4 por ciento del PIB de México.
Hace ocho años, en noviembre de 2016, cuando Trump ganó las elecciones presidenciales por primera ocasión, las remesas tuvieron un súbito incremento de 25.8 por ciento, explicado por el Efecto Trump.
Esto por las amenazas del endurecimiento en la frontera, de deportaciones masivas y por un posible impuesto a las remesas.
En ese mes, el peso mexicano se depreció 5.2 por ciento frente al dólar estadunidense, debido, en parte, por los posibles riesgos de la negociación del entonces Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Sin embargo, el pasado noviembre con la victoria electoral de Trump para un segundo periodo de gobierno, el peso mexicano tuvo una de depreciación mensual de 3.3 por cinto frente la divisa estadunidense, la cual podría considerarse como una fluctuación dentro de los rangos del mercado.
“A diferencia de lo ocurrido hace ocho años, no se tiene evidencia clara de que el Efecto Trump esté teniendo efectos en las remesas a México”, señaló el grupo financiero.
Países dependientes
Por otro lado, países como Nicaragua en el que los ingresos del extranjero representaron 27.2 por ciento de su PIB; Honduras, con 25.2 por ciento; o El Salvador, con 23.5 por ciento, son importantes receptores de remesas en América Latina y el Caribe, con alta dependencia hacia estos recursos.
El banco de origen español señaló que en caso de que se presentara una fuerte deportación de migrantes desde Estados Unidos, uno de los principales destinos de las personas que salen de estos países, es posible que su flujo de remesas pudiera afectarse y ello trajera complicaciones económicas a esas naciones.
“Consideramos que un escenario con deportación masiva es muy poco probable», comentó BBVA.
«Creemos más factible que la nueva administración del presidente Trump va a aplicar medidas para aumentar las deportaciones como aprehensiones, remociones y expulsiones, pero sin que en los datos se observe un aumento significativo en comparación a las cifras históricas”, señaló.
Imagen portada: MILENIO
