En la tercera entrega de los informes individuales y general de la Cuenta Pública 2017, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) observó 68 mil 138.5 millones de pesos pendientes de aclarar por las instancias auditadas en el penúltimo año de gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto.
El titular de la ASF, David Colmenares Páramo, informó a los integrantes de la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados que se realizaron mil 675 auditorías, de las cuales 653 corresponden a los informes individuales entregados, que se suman a 344 rendidos en junio y 678 en octubre.
Detalló que algunos de los resultados relevantes de las auditorías realizadas fue el caso de las instancias infantiles, en donde el gasto promedio anual por niño atendido en las nueve mil 399 estancias infantiles de la entonces Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) fue de 11 mil 500 pesos, esto es de 958 pesos mensuales.
Recordó que los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) tienen un servicio de guardería que atiende a hijos de derechohabientes.
El auditor federal resaltó que en todas las instancias se carece de indicadores y metas para el desarrollo integral de los niños, así como de información suficiente para poder afirmar si se cumplieron o no los objetivos previstos.
Además la extinta Secretaría de Desarrollo Social no acreditó ante la ASF que las estancias cumplieran con los criterios y requisitos de seguridad establecidos en las reglas de operación.
Tampoco el cumplimiento de los criterios y los requisitos de calidad establecidos en las reglas de operación del programa para ser afiliadas, ni la capacitación de los responsables de las estancias en materias como protección civil.
Respecto de la cultura física y el deporte, la Conade no acreditó que los beneficiarios que recibieron los subsidios cumplieron con los requisitos establecidos en las reglas de operación, y careció de los criterios con los que se determinaron los montos que se les otorgaron.
Además no comprobó el ejercicio de los recursos asignados al deporte de alto rendimiento y a las asociaciones deportivas nacionales y órganos de cultura física y deporte. Tampoco sustentó en qué medida, con el presupuesto erogado, promovió y fomentó la actividad física y la práctica del deporte.
En relación con la adquisición y contratación de bienes y servicios, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) no acreditó el monto total del presupuesto reportado en la Cuenta Pública y se identificaron pagos por un total de 262.1 millones de pesos a proveedores que no están en los registros del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Además, se identificaron diferencias en los reintegros realizados a la Tesorería de la Federación. Se recomendó la revisión de las transferencias a las federaciones.
La fiscalización al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) evidenció que, de dos mil 484 millones de pesos ejercidos en uno de sus programas presupuestarios, no comprobó la erogación de mil 602 millones, 64.5 por ciento.
Ello debido a que los beneficiarios no se correspondieron con los apoderados legales acreditados y se presentaron solicitudes de pago sin comprobar.Foto propiedad de: ASF