Por Francisco Tijerina.
“La verdad no hace tanto bien en el mundo como el daño que hacen sus apariencias”
François de La Rochefoucauld
Por más que me esfuerzo no encuentro un adjetivo que pueda describir en toda su dimensión la irresponsabilidad de los diputados del Congreso de Nuevo León al realizar un “exhorto” a Estado y Municipios para que tomen acciones preventivas desazolvando alcantarillas y cauces de ríos y arroyos ante las lluvias torrenciales anunciadas para las próximas horas.
Diese la impresión de que la propuesta de las diputadas Rosa Isela Castro, del PAN, y María Guadalupe Rodríguez, del PT, aprobada por unanimidad, tiene como único fin el “taparle el ojo al macho” y sustraerse de su responsabilidad.
Porque si esta se hubiese dado hace dos meses, tendría el mayor de los sentidos, pero no cuando tenemos el fenómeno meteorológico encima, al grado de que ya la Secretaría de Educación estatal, en previsión de la fuerte cantidad de lluvias, ha determinado cancelar las clases el día de mañana.
No se vale hacer llamados a prevenirse cuando ya comienzan a caer las primeras gotas de lluvia, como tampoco es válido el aventar culpas y buscar escabullirse. Me pregunto, ¿habrán hecho las dos diputadas o alguno de sus compañeros alguna propuesta específica para asignar recursos a un programa especial de conducción de aguas, drenaje profundo o algo por el estilo? Que yo sepa, no.
Lo que hicieron ayer se llama, aquí y en China, montarse en la ola y administrar la coyuntura. Decirnos lo que es obvio y sobre ello lanzar exhortos es un insulto a la inteligencia de los nuevoleoneses y una burla para el Poder que dicen representar.
A ver cuándo dejan de andarle “tapando el ojo al macho” y se ponen a desquitar el salario que perciben.
