Al encabezar la ceremonia por el 51 aniversario de la Masacre de Tlatelolco en la Plaza de las Tres Culturas, la jefa de gobierno, Claudia Sheibaum Pardo, calificó a ese suceso como un crimen de Estado. Acompañada por parte de su gabinete, representantes de los tres poderes locales, autoridades federales y exlíderes del movimiento del 68, la mandataria sostuvo que nunca más habrá un gobierno represivo, sino responsable.
Antes izó la bandera a media asta y colocó una ofrenda floral en la Estela de Tlatelolco, que recuerda a los caídos y desaparecidos del 2 de octubre de 1968.
En el inicio de su mensaje pidió un minuto de silencio a los presentes «por los caídos en esta plaza, por los caídos en la lucha por la democracia y las libertades de nuestro país y por aquellos que en el camino nos han ido dejando”.
Recordó que en 1968 ella tenía seis años y su madre participó en el movimiento estudiantil como profesora de la Escuela de Ciencias Biológicas del Politécnico, por lo que creció al lado de dirigentes estudiantiles como Félix Hernández Gamundi, Raúl Álvarez Garín y Salvador Martínez della Rocca.
La jefa de gobierno de la Ciudad de México destacó lo que la matanza de Tlatelolco significó en su vida personal y ahora como gobernante para luchar a favor de la justicia, las libertades y la democracia en el país.
“El día de hoy estamos conmemorando un crimen de Estado, una masacre a jóvenes estudiantes que luchaban por la libertad y la justicia”, señaló.
Hizo alusión al pliego petitorio de los estudiantes, lo que la llevó a tomar la decisión como jefa de gobierno de desaparecer el cuerpo de granaderos de la Policía de la Ciudad de México.
“Nos formó, nos marcó en la idea de la lucha por la libertad, por la democracia, y jamás utilizar las fuerzas del Estado para reprimir los movimientos sociales, los movimientos democráticos y menos los movimientos estudiantiles”.
En su oportunidad el exlíder del movimiento del 68 Félix Hernández Gamundi externó que si bien siguen vigentes muchas demandas sociales éstas deben externarse en forma pacífica.
“Hay que sumarnos a esa lucha, hay que sumarnos a las demandas del pueblo mexicano, pero hagámoslo pacíficamente porque todo mundo tiene un lugar, y todo mundo debe ocupar ese lugar siempre que tenga una demanda que pueda respaldar de manera honorable con dignidad y reconociendo el derecho de los demás a la libertad y a manifestarse pacíficamente”, llamó el exdirigente.