Por José Jaime Ruiz
Zona Rosa, zona fifí. ¿Por qué no en Tacubaya o en la Doctores? La reunión patrocinada por The Resistance a través de Reforma dio su sentido total de derecha. El conservadurismo militante, pero también la deformación. Carecen de ideas y, sin embargo, profesan intereses. ¿Quiénes serán sus ideólogos? ¿Agustín Basave que de viejo dejó la izquierda para recuperar la genealogía intelectual de su padre? ¿Macario Schettino para quien tuitear es más importante que articular? ¿Raúl Trejo Delarbre a quien el día le pasa de noche? ¿Rubén Aguilar? Por favor.
La miopía de la derecha los evidencia. Cito su comunicado.
1.- “Frente a un proyecto político que se define por una sola voz y una sola visión, es necesario defender la pluralidad, el diálogo y la reconciliación.”
Tremendo error. El presidente Andrés Manuel López Obrador tiene detrás más de 30 millones de voces, suma y sigue. La visión de Andrés Manuel no es excluyente, es incluyente, lo hizo con sus comentarios de hoy que no descalifican a la derecha, la comprenden y asumen, precisamente, la pluralidad. ¿Con quién no ha dialogado López Obrador? ¿Reconciliar qué? AMLO olvidó la política de conflicto para intentar la política de composición, ¿qué no se entiende?
2.- “Nos preocupa que frente al mínimo disenso con el actual régimen sobrevenga una escalada de descalificaciones, linchamientos y persecución.”
The Resitance, tremendo error. No se confundan. Andrés Manuel le aprendió a Carlos Monsiváis algo básico: esto es circular. Si no es facultad, el presidente tiene derecho de réplica. La crítica, decía Octavio Paz, empieza por ser una autocrítica. La derecha, los intelectuales orgánicos del neoliberalismo, no han hecho su autocrítica. Si todo lo sólido se desvanece en el aire, la derecha requiere oxigenarse. ¡Qué bien que sean un contrapeso! Pero ahora ni gravitan ni pesan. Es bueno organizarse, intentar retomar el cielo por asalto.
Que me disculpen mis hermanas feministas, pero plañideras porfiristas ya no. Asuman su responsabilidad sin engañar. Fuera máscaras. Derechas, devoraron al país. Ya no. Ternuritas, encuentren su camino. Tal vez la epifanía de Damasco les ayude. ¿Hay que criticar al imperfecto Andrés Manuel? Obvio, es nuestra chamba también. Como cantó Víctor Manuel, para la ternura siempre hay tiempo.
@ruizjosejaime