“Observa, escucha, calla. Juzga poco, pregunta mucho”
Arturo Graf
Y de pronto Luis Donaldo Colosio Riojas desapareció de la escena.
Resulta por demás extraño que de la nada el coordinador de la fracción de Movimiento Ciudadano en el Congreso del Estado se haya replegado en un ostracismo vaya usted a saber si voluntario o forzado.
Y es que acostumbrados a verlo un día y otro también opinando de todos los temas, resulta curioso el que de la nada haya desaparecido de la escena pública cediéndole toda la cancha, y la representación de los naranjas, a sus compañeras Mariela Saldívar y Karina Barrón.
En política no hay casualidades, sino causalidades.
Y es que el mutis de Luis Donaldo se da después de que con bombo y platillo se anunciara que sería el encargado de construir las estructuras de apoyo de Movimiento Ciudadano en Monterrey, lo que en los corrillos políticos se interpretó como un destape virtual del diputado para la alcaldía de Monterrey en el 2021.
Error de cálculo y estrategia y luego de ver la inmediata repercusión que tuvo la noticia, las huestes emecistas hubieron de realizar un “control de daños” diciendo que Colosio seguiría centrado en su labor como diputado y coordinador de la fracción, pero que trabajaría en la construcción de esa estructura también sin ser necesariamente el candidato naranja a la capital nuevoleonesa.
Lo curioso es que ahora, semanas después y en medio del silencio colosista aparece una publicación en una columna política en donde se asegura que el amigo, socio y compañero de aventuras de Donaldo, Agustín Basave quien a su vez es presidente estatal del partido, estaría trabajando para hacer a un lado al aspirante “cantado” de Movimiento Ciudadano, el senador Samuel García, para impulsar precisa y justamente a Colosio como aspirante a la gubernatura. Obvio que más rápido que inmediatamente Basave hubo de aclarar paradas y desmentir el rumor que apareció publicado al día siguiente.
Pero con todo y todo Colosio no habla, está callado, agazapado, en un silencio que nadie entiende, que ni siquiera rompió cuando su compañera Karina Barrón acudió a una reunión de líderes de bancadas representando a los naranjas.
¿Qué es lo que realmente está haciendo Colosio y por qué su misterioso silencio? ¿Tiene que ver acaso con su futuro político? ¿Fue un “estate quieto” o de plano un acto de autocensura del legislador que no quiere hacer ruido y evitarse problemas con la dirigencia real -que no la de membrete- de Movimiento Ciudadano?
Extraño, muy extraño, porque cuando todos los actores políticos comienzan a moverse, Colosio se enconcha y se cubre de una penumbra que abre un espacio para imaginar muchas cosas, todas las que usted quiera.
ftijerin@rtvnews.com