Una marcha autorizada en memoria del político opositor Boris Nemtsov, asesinado hace cinco años, se transformó hoy en una manifestación contra las reformas constitucionales del presidente ruso, Vladimir Putin.
De acuerdo con White Counter, organización que monitorea el número de participantes en manifestaciones, fueron al menos 22 mil personas las que, además de portar fotos de Nemtsov en esta capital, agitaban carteles que decían «no al eterno Putin».
Las autoridades otorgaron el permiso oficial para esta marcha anual, en contraste con las realizadas en verano de 2019, cuando participaron al menos 60 mil personas y diversos manifestantes fueron detenidos.
Los organizadores afirmaron que era inevitable vincular la figura de Nemtsov contra las reformas constitucionales donde el gobierno ruso pretende otorgar mayores atribuciones al parlamento, como la posibilidad de elegir al primer ministro. Figura que podría ocupar Putin tras finalizar su presidencia.
Nemtsov, ex vice primer ministro, fue abatido a tiros en el centro de Moscú el 27 de febrero de 2015. Dos años después el Tribunal Militar del Distrito capitalino dictó condenas a cinco «perpetradores».
El opositor también fue líder del partido político Libertad Popular (PARNAS), compuesto por varias organizaciones contrarias a Putin, que frecuentemente han sido incapaces de forjar alianzas para enfrentar al partido oficial, RusiaUnida.
Según Human Rights Center, el número de presos políticos en la Federación de Rusia ha aumentado en más de seis veces desde 2015.