Las mujeres no estamos dispuesta a seguir tolerando vejaciones y agresiones, se pronunciaron hoy las integrantes de la Asamblea Feminista Juntas y Organizadas, que participa en la organización de la marcha por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora este 8 de marzo.
«Estamos hartas y no estamos dispuestas a seguir tolerando las vejaciones y agresiones que significa la violenciamachista y patriarcal. Mientras el número de feminicidios crece, este es el año con el recorte presupuestal más grande contra las mujeres. Hay un claro desprecio a las políticas públicas con perspectiva de género, una omisión que también implica la violación masiva de nuestros Derechos Humanos», señalan en su posicionamiento.
A través de un documento en el que llamaron a la unidad, sororidad y fuerza, reclamaron sentirse insultadas por el gobierno federal al que acusaron de estar más ocupado en desacreditar los movimientos feministas y las movilizaciones de este día, que por aplicar políticas públicas eficientes y eficaces para revertir la desigualdad que causa la violencia machista.
Consideraron que hay indiferencia del Estado Mexicano puesto que no ha sabido comprender el movimiento de las mujeres.
«No se entiende que el deber del Estado no es vender billetes de lotería o cuidar las puertas de Palacio Nacional. Su deber, su obligación es garantizar el derecho humano a la vida de las mujeres, a vivirla libre de violencia. Eso dice la ley, pero también lo dicta la ética y la razón», señalaron.
También reclamaron que los integrantes de las diferentes iglesias que se han sumado al paro del 9M, a las empresas y los partidos políticos que se han intentado colgar del movimiento, les reclamaron por intentar «ordenar cómo debemos protestar contra ellos» y consideraron una provocación que en las empresas se estén otorgando permisos para participar en el paro.
«Hemos reconocido, una vez más la indiferencia de una política de Estado que no ha sabido comprender nuestro movimiento y que criminaliza la expresión de nuestra rabia deslegitimando la protesta como mecanismo de defensa colectiva frente a su sistema de muerte, que apunta, feminicida, sobre nuestros cuerpos».
Reclamaron que la acción de la policía «no es tan dura con los feminicidas como contra las mujeres» al momento de controlar y dar seguimiento a las marchas y movilizaciones que se organizan en este día; y pidieron aplicar políticas más efectivas como las de protección a la infancia y servicios de cuidado y políticas laborales con enfoque de género por parte del Estado para eliminar la desigualdad, además de un efectivo combate a la impunidad y la resolución de casos de violencia feminicida; así como dejar de revictimizar a las víctimas y a sus familias.
Estos serían los primeros pasos para avanzar en el combate de la violencia que hoy se denuncia.
Por lo pronto, la marcha de hoy y la toma de las calles se llevarán a cabo para exigir que no haya más feminicidios.
«Para que a ninguna mujer vuelva a sucederle lo mismo que a Isabel Cabanillas o a Ingrid Escamilla, para que el llanto de ninguna niña se parezca al de Fátima y que ninguna madre más se desgarre por que su hija ya no está».