Por José Jaime Ruiz
@ruizjosejaime
A connecting principle,
Linked to the invisible
Almost imperceptible…
The Police
Tergiversar y distorsionar son los verbos actuales de la propaganda que se enmascara en periodismo: titulares tendenciosos (Reforma), especulaciones mostradas como reportajes (Azam Ahmed en NYT), mentiras convertidas en “verdades” (Carlos Loret de Mola) o la sincronía como complot (Ciro Gómez Leyva).
¿Qué dijo López-Gatell ayer viernes?
“Me llama la atención que hoy, fecha que anunciamos la llegada del pico cumbre de la epidemia en la CDMX, aparecieran de manera casi sincrónica estas cuatro notas, seguidas por una amplia difusión en redes sociales por individuos ligados a administraciones anteriores, a la industria farmacéutica y unos cuantos con aspiraciones políticas”.
A todos nos llamó la atención esa sincronía (NYT, El País, WSJ) porque, obvio, llama la atención, aunque no se hayan puesto de acuerdo; obvio, traten el mismo tema; obvio, tengan el mismo enfoque; obvio, provoquen reacciones homogéneas para criticar el gobierno en redes sociales. Obvio, obvio, obvio… aunque no se hayan puesto de acuerdo. De lo anterior a que Ciro Gómez Leyva nos diga que lo que realmente dijo López-Gatell, aunque nunca lo dijo, es un complot, pues Ciro hay una distancia enorme y una cercana manipulación de la nota. Y así se cumple el objetivo: distorsionar, tergiversar.
Los manipuladores de la información le quieren endosar su pecado a López-Gatell. Van más allá, por ejemplo Reforma cabecea: “Reportan 59% menos muertes”, titular seco, afirmativo, contundente… pero luego matiza: “El Gobierno federal estaría dejando de informar hasta un 59 por ciento de fallecidos por Covid-19 en hospitales de la CDMX y el Valle de México, según se desprende de un documento revisado durante una reunión oficial de evaluación de la epidemia”.
¿En qué quedamos? ¿Reportaron menos o el gobierno “estaría dejando de informar”? A ver, Alejandro Junco de la Vega, ilumínanos, ¿qué quisieron redactar tus muchachos?
En la misma portada otra noticia espectacular: “Cuestionan en el mundo cifras de Covid en México”. Wow!, los ojos del planeta cuestionando a nuestro país. Y luego la información: “Tres periódicos internacionales publicaron ayer notas sobre la pandemia de Covid-19 en México, en las que cuestionan las cifras oficiales de contagios y fallecidos”. ¡Pufff, qué fiasco! Nos habían dicho tus muchachos que el mundo, Alejandro, que el mundo… Ahora resulta que un periódico de Madrid y dos de Nueva York representan al periodismo del planeta. ¡Chin!, desinflaron mi entusiasmo provinciano (cfr. Umberto Eco).
Gatilleros-gacetilleros, tan conectados, tan linkeados, tan perceptibles, tan ternuritas… Ya mejor reproduzco la gran fábula del escritor Joaquín Hurtado publicada hoy en su Face:
“Gatilleros Gacetilleros: ¿Dr. Gatell, cuántas hormigas hay en un hormiguero?
Dr. Gatell: Evidentemente hay muchas más que las apreciadas a simple vista, pero si aplicamos el modelo Centinela que consiste en aplicar encuestas y registrar factores como especie, edad del hormiguero, disponibilidad de alimento, depredadores, etc., podríamos hacer una estimación aproximativa con modelos matemáticos sin necesidad de excavar, contabilizar individualmente las hormigas, exponerse a picaduras, gastar dinero, perder tiempo… Mejor dejemos las hormigas en paz y resguardémonos para que los animalitos no nos ataquen.
Gatilleros Gacetilleros: Entonces usted está ocultando el número exacto de insectos que realmente hay, por eso la gente ya no le cree nada, por eso una horripilante marabunta destruirá México, usted es un monstruo, renuncie ya junto con el presidente que solo quiere el líquido de nuestras rodillas…”