La bancada del PRI del Congreso Local solicito a la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) inicie una investigación y eventual sanción a los establecimientos que no respetan la ley al llevar a cabo un alza a los precios de la canasta básica durante los meses de la contingencia sanitaria.
Francisco Cienfuegos Martínez, coordinador de la bancada priista dijo que era urgente aplicar acciones.
Refirió que la Ley Federal de Protección al Consumidor, en su artículo 10 Bis es bastante claro ya que prohíbe el alza de precios en situaciones extraordinarias, como es el caso de la contingencia sanitaria.
La petición dirigida al Delegado de la PROFECO en Nuevo León, Aarón González Vázquez, fue entregada por Cienfuegos en la oficialía de partes de la dependencia federal, ubicada en la colonia Mitras Centro, en Monterrey.
«Pido que realicen inspecciones a tiendas y supermercados de la zona metropolitana de Monterrey, para verificar el cumplimiento de precios y tarifas establecidos por la autoridad competente y se establezca la imposición de medidas de apremio, sanciones económicas y en su caso denuncia ante el Ministerio Público de los hechos que puedan ser constitutivos de delitos».
«Esta misma semana yo esperaría que la PROFECO empezara los trabajos de verificación y de auditoría, y que el mismo día de hoy o a partir del día de mañana esté clausurando establecimientos y presentando las denuncias correspondientes», manifestó.
«La Ley Federal de Protección al Consumidor ampara en su artículo 10 BIS que no haya ningún aumento, ya que establece que los proveedores no podrán incrementar injustificadamente precios por fenómenos naturales, meteorológicos o contingencias sanitarias», precisó el Coordinador priísta.
El legislador dijo que la población está viviendo situaciones económicas no vistas en la era moderna; sin embargo, no por ello se debe de abusar del momento y buscar una tajada en perjuicio de terceros.
«Es momento de solidaridad, es momento de empatía con el prójimo no podemos nosotros estar lucrando con la necesidad de la gente, muchas familias han perdido el sustento económico para llevar alimento a sus hogares; en Nuevo León se han perdido más de 90 mil fuentes empleos, y, aun así, vemos estos aumentos de precio de los productos de la canasta básica; no se vale, realmente es reprochable y lamentable», expresó.
Manifestó que es momento que la PROFECO se ponga a trabajar ya que tiene facultades de vigilar y verificar el cumplimiento de las disposiciones en materia de precios y tarifas.