Agentes ministeriales colocaron un brazalete electrónico a Emilio Lozoya para vigilar su ubicación durante el proceso que enfrenta ante la Fiscalía General de la República (FGR) por corrupción en los casos Odebrecht y Agronitrogenados.
De acuerdo con el diario El Universal, los agentes ingresaron esta tarde al hospital privado en donde Lozoya Austin permanece desde su llegada a México el pasado 17 de julio. Además de los oficiales, estuvieron presentes uno de los abogados del imputado y un representante de la empresa responsable de rentar el brazalete.
Ayer miércoles 29 de julio, un juez de control vinculó a proceso al exdirector de Pemex por los delitos de asociación delictuosa, cohecho y operación de recursos de procedencia ilícita. Esto en el caso de los sobornos de más de 10 millones de dólares que recibió de la constructora brasileña Odebrecht entre 2012 y 2013.
Un día antes, otro juez resolvió en el mismo sentido por el delito de operación de recursos de procedencia ilícita, pero en referencia al caso de la planta Agronitrogenados. En ambos casos, los jueces decidieron que Lozoya podía permanecer en el hospital por el tiempo que sea requerido y que para su ubicación se le colocaría el brazalete, mismo que desde esta noche porta en el tobillo.
Debido a que la FGR no solicitó la medida cautelar de prisión preventiva, Lozoya podrá abandonar el hospital en cuanto su anemia se lo permita y enfrentar su proceso en libertad.
El brazalete ya está activo y envía alertas por satélite en lapsos de entre 30 y 60 segundos.
Emilio Lozoya busca concretar un acuerdo de «criterio de oportunidad» con la FGR para señalar a todos los integrantes del «aparato superior de poder» que asegura lo intimidaron y presionaron para incurrir en los delitos que le imputan. Por la importancia de su testimonio, la autoridad ha decidido algunas concesiones en su trato.
