Investigadores de la Universidad de California, publicaron un estudio en el cual refieren que la utilización del cubrebocas, podría ser no solo una medida preventiva ante el Covid-19, sino que su uso, señalan, generaría más beneficios, como una especie de inmunidadcontra la enfermedad.
Los especialistas publicaron en la revista médica The New England Journal of Medicine el pasado 8 de septiembre, una hipótesis en la que establecen que las mascarillas, fungen como un elemento de variolización, es decir que su uso permitiría que la carga viral recibida por las personas, sería la mínima.
De acuerdo con lo explicado en el trabajo, en un escenario en el cual una persona llegue a infectarse de coronavirus mientras usaba un cubrebocas, se podría presentar que la enfermedad que adquiriría el sujeto, sería asintomática.
Los científicos apuntaron que en las sociedades en donde la mayor parte de la población usa el cubrebocas, se ha observado que la proporción de casos asintomáticos es de hasta el 80 por ciento, mientras que donde el uso de las mascarillas no es generalizado, la proporción de casos asintomáticos es solo del 40 por ciento.
Aunado a lo anterior, el estudio publicado mencionó 2 situaciones en las que la utilización de las mascarillas, tuvieron un papel importante en la producción de un alto número de casos asintomáticos.
El primer escenario alude a lo ocurrido en un barco argentino y el segundo a los hechos desarrollados en una planta procesadora de carnes, en las que debido al uso de los cubrebocas, que se repartidas a etapa muy temprana del brote, la proporción de asintomáticos fue de 81 por ciento y 95 por ciento respectivamente.
Tras la publicación del texto, el doctor Elmer Huerta refirió que la hipótesis de los investigadores, podría ser probada al hacer una comparación de la proporción de casos de Covid-19 en sociedades donde se use y no se use el cubrebocas.
En cuanto al concepto de “variolización”, el especialista explicó que proviene de la viruela, pues se cree que practicantes médicos que trabajaban en algún lugar de África, China o la India, generaron un método de control de la enfermedad que no la eliminaba completamente, pero si ayudaba a disminuir su intensidad.