La llamada del presidente Andrés Manuel López Obrador para denunciar a los huchicoleros tuvo eco en el municipio de Linares, donde los lugareños denunciaron una toma clandestina que tenía varias semanas operando. La toma se detectó en el tendido de Pemex, en una zona de cultivos en la región citrícola.
La denuncia ocasionó la movilización de personal de la Secretaría de la Defensa Nacional, quienes fuertemente armados acudieron al Ejido Lampazos. Los testigos mencionaron que se veía a diario el movimiento de pipas y se percataron que de una de ellas escapaba combustible con olor a gasolina. Explicaron que para evitar que en su tierra se registrara una tragedia como la ocurrida en la población de Tlahuelilpan, en el estado de Hidalgo, decidieron denunciar. Durante las acciones, los militares mencionaron que no fue posible detener algún sospechoso, porque en ese momento no había pipas cargando. Personal de seguridad de Pemex que llegó al sitio para iniciar las indagatorias, mencionó que al ducto se le había colocado una válvula especial para conectar una manguera y así poder sustraer la gasolina. El ducto fue asegurado por las autoridades municipales y elementos del Ejército custodiaban el área, para evitar un posible incidente.
