La organización Amnistía Internacional (AI) acusó a Estados Unidos de matar “indiscriminadamente” a civiles, incluidos niños, en los bombardeos que lleva acabo en Somalia contra militantes del grupo islamitas Al Shabab. En un reporte, la organización no gubernamental aseguró que los bombardeos estadounidenses en Somalia se triplicaron bajo la administración del presidente Donald Trump, superando incluso los que ha ordenado en Yemen y Libia, de manera conjunta con otras naciones.
El documento, titulado “La guerra oculta de Estados Unidos en Somalia” detalla cómo murieron 14 civiles y ocho más resultaron heridos en solo cinco de los más de 100 ataques que aviones no tripulados Reaper llevaron a cabo en Lower Shabelle, una región en gran parte controlada por Al Shabab.
“El número de muertos civiles que hemos descubierto en solo un puñado de huelgas sugiere que el secreto que rodea al papel de Estados Unidos en la guerra de Somalia es en realidad una cortina de humo para la impunidad”, afirmo Brian Castner, Asesor Principal de Crisis de Armas y Operaciones Militares de AI.
Nuestros hallazgos, agregó, contradicen directamente el mantra del ejército estadounidense de “cero víctimas civiles en Somalia”. Esa afirmación parece aún más extravagante cuando se considera que Estados Unidos ha triplicado sus ataques aéreos en todo el país desde 2016”
La organización defensora de los derechos humanos considera que los ataques estadunidenses parecen haber violado el derecho internacional humanitario, y algunos pueden constituir crímenes de guerra, dado la manera en que han perdido la vida muchos civiles, incluidos ancianos, mujeres y niños.
En el curso de su investigación, la misión de AI viajó a Somalia y realizó más de 150 entrevistas con testigos presenciales, familiares, personas desplazadas por los combates y fuentes expertas, incluidas las fuerzas armadas estadounidenses Además de analizar rigurosamente las pruebas corroborantes, incluidas imágenes satelitales, fragmentos de municiones y fotos de las consecuencias de los ataques aéreos, en aumentó de después del 30 de marzo de 2017, cuando Trump firmó una Orden Ejecutiva que declaró el sur de Somalia “área de hostilidades activas”.
Amnistía Internacional precisó que las fuerzas estadounidenses realizaron 34 ataques en Somalia en los últimos nueve meses de 2017, muchos más que los efectuados entre 2012 y 2016, mientras que en 2018 realizó 47 y 24 sólo en los primeros dos meses de 2019.
“Se sabe que las fuerzas estadounidenses realizaron otros 76 ataques aéreos en Somalia durante el período examinado por Amnistía Internacional, así como 24 en los primeros dos meses de 2019, por lo que el número de muertos civiles puede ser mucho mayor”.
Ella Knight, investigadora militar, de seguridad y policial de AI, señaló que el gobierno de Estados Unidos debe garantizar que se lleven a cabo investigaciones sobre todas las denuncias creíbles de víctimas civiles, castigar a los responsables de las violaciones y ofrecer reparaciones responsables a los sobrevivientes
“Tanto el gobierno de Estados Unido, como el de Somalia deben poner fin a la falta de transparencia y deben hacer más para que las comunidades afectadas puedan denunciar las víctimas civiles, sin la cual es probable que la justicia siga siendo esquiva”.
