Con 118 votos a favor, el Senado de la República aprobó prohibir el matrimonio infantil en el país mediante la derogación de varios artículos del Código Civil Federal. Parte de las modificaciones impulsadas es la de establecer como edad mínima para casarse 18 años, además de que el Juez del Registro Civil deberá pedir las declaraciones que necesite a fin de asegurarse que los contrayentes tienen la mayoría de edad.
Una de las impulsoras, la senadora por el Partido Acción Nacional, Josefina Vázquez Mota, recordó que México se encuentra dentro de los primeros 10 países que registran más matrimonios infantiles con un millón 300 mil casos al año.
Aseguró que la mitad de las mujeres que se casan antes de la mayoría de edad sufren violencia física, 70 por ciento violencia sexual, y 16 por ciento violencia económica, por lo cual es un tragedia para la infancia en México: “Las niñas que se casan no permanecen en la escuela, tienden a embarazarse prematuramente, tienen más riesgo de sufrir discriminación y violencia doméstica”.
Otra de las impulsoras, la priista Verónica Martínez García, dijo que la reforma corresponde a recomendaciones internacionales, para garantizar la protección de las mujeres, sobre todo las que se encuentran en zonas rurales y remotas: «…desde los embarazos precoces hasta diversos tipos de violencia, por lo que al prohibir tal acto, se pretende disminuir esos problemas que violentan la integridad y el desarrollo de las niñas, niños y adolescentes».
De acuerdo con lo propuesto por la Senadora por el Partido del Trabajo, Geovanna Bañuelos, también se prohíbe el matrimonio cuando una persona menor haya estado bajo tutela de la persona con la que se propone contraería matrimonio.
Foto propiedad de: Galo Cañas/Cuartoscuro
