Ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Árabe rechazaron el reconocimiento de Estados Unidos al control de Israel sobre los Altos del Golán, afirmando que esa región es tierra siria, asunto sobre el cual los líderes árabes presentarían una oposición unificada el próximo domingo.
En el encuentro, inaugurado este viernes en Túnez, los cancilleres árabes discutieron una serie de asuntos regionales como el conflicto en Yemen, el comportamiento de Irán, la guerra en Siria, la crisis en Libia, la causa palestina, el boicot a Qatar y el terrorismo.
La ocupación de los Altos del Golán y de Jerusalén por parte de Israel, movimientos respaldados por Estados Unidos, fueron temas que centraron gran parte de las discusiones de los ministros, quienes se reunieron para preparar la cumbre de la Liga Árabe que tendrá lugar dentro de dos días.
“Rechazamos la declaración del presidente (de Estados Unidos, Donald) Trump sobre el Golán ocupado, que es tierra árabe siria”, sostuvo el ministro saudita de Asuntos Exteriores, Ibrahim Al-Assaf, quien expresó el respaldo de su país a la integridad territorial de Siria y a una solución política a la guerra.
Al-Assaf también lamentó la decisión de Washington de mover su embajada en Israel, de Tel Aviv a Jerusalén, una crítica a la que hizo eco el canciller tunecino, Khemaies Jhinaoui, quien declaró “rechazamos cualquier medida que afecte el estado histórico de Jerusalén”.
Sobre Irán, los ministros coincidieron en que los misiles balísticos iraníes representan una amenaza para la seguridad regional e internacional y criticaron la “interferencia de Teherán y sus milicias” en el mundo árabe, como lo hace en el conflicto que vive Yemen.
En su discurso, el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, reconoció los esfuerzos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Yemen, Siria y Libia, donde estimó que se han observado progresos, pero pidió una solución política para esas tres naciones.
Respecto a la causa palestina, los diplomáticos externaron su respaldo al establecimiento de un estado palestino con Jerusalén Este como su capital basada en resoluciones internacionales. Además, pidieron el fin de la disputa entre países árabes y Qatar, al que acusan de financiar a grupos terroristas.
Reiteraron que el papel de la Liga Árabe es abordar problemas regionales para servir a las causas comunes, y el terrorismo existe en la región y es unos de los mayores desafíos, por lo que instaron a la acción para erradicar las causas que lo originan.