La totoaba es un pez, que al igual que la vaquita marina, se encuentra en peligro de extinción, por su pesca la población de la marsopa oriunda de México ha decrecido a niveles alarmantes pues se calcula que para marzo de 2019 existían sólo entre 10 a 15 ejemplares del mamífero marino en el Alto Golfo de California.
La totoaba se pesca por el valor de su vejiga natatoria, un kilo del cual en el mercado negro de China llega a valer entre 20 mil a 80 mil dólares, es decir hasta millón y medio de pesos en su máximo valor de venta.
De acuerdo con InSight Crime, en el tráfico ilegal de totoaba está involucrado el narcotráfico mexicano, en específico el Cártel de Tijuana y el Cártel de Sinaloa, el cual abastece al negocio, primero como regalo de bodas o inversión en China, además de que el ‘buche’ del pez se emplea como ingrediente en sopas y porque se cree, aunque sin fundamento científico, que dispone de beneficios medicinales o afrodisiacos y se considera un manjar.
La pesca de totoaba es considerada ilegal en México, pero detrás de la actividad hay pescadores de San Felipe y Santa Clara en Baja California que participan y transportan las vejigas natatorias a Tijuana y Mexicali donde los traficantes chinos las secan, procesan y trasladan al sur de China.
Tráfico de totoaba, un mercado ilegal en aumento
En diciembre de 2018 se incautaron 444 kilos de vejiga de totoaba secos cuyo valor en el mercado sería de 26 millones de dólares.
Según un informe de Elephant Action League (EAL), un traficante pagó al Cártel de Tijuana para que le permitiera trasladar los kilos de buche de totoaba por su territorio y el año pasado, un operador del Cártel de Sinaloa, Óscar ’N’, ‘El Parra’, fue detenido por tráfico de drogas y el homicidio de un elemento de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), además es considerado líder del tráfico de buche de totoaba hacia el continente asiático.
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