La carta presentada por Carlos Urzúa para renunciar a la titularidad de la Secretaría de Hacienda abre interrogantes sobre la responsabilidad de personajes cercanos al presidente Andrés Manuel López Obrador en el diseño de la política de austeridad. Uno de los primeros nombres que surgen es el de Alfonso Romo, jefe de la oficina de Presidencia de la República.
En la carta presentada poco antes del mediodía, Urzúa Macías emplea términos como “discrepancias”, “extremismo”, “inaceptable”, “imposición” e “influyentes”. Además, acusa que fue imposible continuar su gestión debido a la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública por personajes influyentes con conflicto de interés: “Esto fue motivado por personajes influyentes del actual gobierno con un patente conflicto de interés”
La carta de Carlos Urzúa Macías es la segunda en exponer graves discrepancias en materia económica al interior del gabinete de Andrés Manuel López Obrador. La primera fue autoría de Germán Martínez Cázares, al presentar su renuncia al Instituto Mexicano del Seguro Social. En ella acusó “injerencia” de personal de Hacienda en el rediseño del sistema de salud y protección social.
“Quiero decirlo lo más claro que puedo y debo: algunos funcionarios de la Secretaría Hacienda tienen una injerencia perniciosa en el IMSS y ponen en riesgo la vocación igualitaria, de justicia y, concretamente, de prestación de servicios de salud que tiene el Seguro Social”.
Al igual que en la renuncia de Martínez Cázares, el presidente reaccionó con celeridad a la de Carlos Urzúa y anunció que la Secretaría de Hacienda quedaría en manos de Arturo Herrera, quien se desempeñaba hasta la mañana de este turbulento martes como subsecretario en Hacienda.
Alfonso Romo ¿detrás de la renuncia de Carlos Urzúa?
El 3 de julio de 2018, Andrés Manuel López Obrador designó como responsables del tema económico en su equipo de transición a Carlos Urzúa y Alfonso Romo. Junto con Jiménez Espriú, Romo y Urzúa también integraron en octubre la comisión para negociar el fin del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en el lago de Texcoco, a pesar de las diferencias en cuanto a la continuidad o conclusión del proyecto.
Pero la dupla habría comenzado a tener discrepancias públicas en marzo de 2019, cuando Alfonso Romo anunció en la 102 Asamblea General de Socios de la American Chamber que sería necesario hacer más recortes en las plazas de Gobierno: “Créanle al presidente que vamos a pasar de una austeridad republicana a una pobreza franciscana (…) Yo veo a las secretarías agobiadas, por eso las defiendo, porque les quitaron una gran parte de presupuesto y de la gente”.
Carlos Urzúa respondió a Romo -sin nombrarlo-, aludiendo que no habría más recortes en el gobierno asegurando que los techos presupuestales no tenían cambios: “Esto viene a cuento porque también hay gente que dice ‘no pues es que ya van a despedir más funcionarios públicos, ¿qué vamos a hacer?’ ¡Pues no! Los techos presupuestales para puestos y salarios no se han modificado y no se van a modificar”
De manera paralela, en la columna de Darío Celís se filtró que Carlos Urzúa impulsó la llegada a la Oficina de Presidencia de Carlos Alberto Martínez como jefe del gabinete económico, razón por la que Alfonso Romo habría creado un gabinete paralelo con Héctor Guerrero, ex empleado de Eduardo Tricio en Grupo Lala.
La posibilidad de que alguno de los dos abandonara el gabinete de Andrés Manuel López Obrador comenzó a plantearse en diversas columnas. El 28 de marzo Ricardo Raphael planteó la salida de Carlos Urzúa mientras que el 7 de mayo Raymundo Riva Palacio aseguró que Alfonso Romo sería quien puso primero su renuncia en la mesa del presidente.
Al designar a Arturo Herrera como nuevo titular de Hacienda, López Obrador subrayó que Urzúa Macías no se encontraba conforme con las medidas asumidas por la administración federal y espetó: “No se puede poner vino nuevo en botellas viejas”
Gana Romo, advierten
Diversos usuarios de redes sociales, entre ellos el periodista Álvaro Delgado, consideran que la renuncia de Carlos Urzúa es una victoria de Alfonso Romo.
Foto propiedad de: Andrea Murcia / Cuartoscuro