La marcha por el 2 de octubre a 51 años de la masacre en Tlatelolco, inició con la exigencia y consigna histórica: “¡Dos de octubre, no se olvida. Es de lucha combativa”, en voz del Comité 68, así como de miles de estudiantes, activistas y sociedad civil que salieron a las calles de la Ciudad de México.
Desde antes de las 4 de la tarde, los contingentes se empezaron a juntar en la Plaza de las Tres Culturas y sus alrededores. Con banderines de la UNAM, el Poli y la UAM, estudiantes de diferentes instituciones educativas llegaron y recordaron la organización del movimiento estudiantil de 1968.
“Ni perdón ni Olvido”, se lee sobre una bandera por el 68, Ayotzinapa, Acteal, Aguas Blancas, Atenco, Tlatlaya, entre otros casos graves de violaciones a los derechos humanos, pues recordaron que, a 51 años, nadie la demanda es la misma: verdad y justicia.
Otra exigencia del Comité 68 y los manifestantes de este 2 de octubre es “Juicio y Castigo a Echeverría”, pues el expresidente tiene una protección política, sin embargo, demandan que sea llamado de nueva cuenta ante las autoridades y pueda ser juzgado por el genocidio de 1968 en Tlatelolco.
De esta manera, la marcha continuó por Eje Central Lázaro Cárdenas, la encabezaban sobrevivientes e integrantes del Comité 68 desde que partió en la Plaza de las Tres Culturas hacia el Zócalo capitalino.
Enseguida, marcharon los padres y madres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecido el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, junto a un amplio contingente de normalistas que gritaron durante toda la protesta “¡Vivos los queremos!”, demanda respaldada por alumnos de diferentes casas de estudios.
Desde Tlatelolco estuvo presente el “Cinturón de paz” integrado por funcionarios del Gobierno de Ciudad de México y civiles que portaban playeras blancas con la leyenda “2 de Octubre, No se olvida”, en la parte frontal, y “cinturón de paz” en la parte trasera. Sin embargo, enseguida que pasaban los manifestantes, estas vallas humanas se disolvieron.
Algunos participantes del cinturón también protestaban desde sus lugares, gritaron “Justicia, Justicia” o en ocasiones hubo quienes se quitaron la playera y se unieron a la marcha. En todas las calles aledañas a Eje Central Lázaro Cárdenas y Avenida 5 de mayo, hubo presencia de cientos de policías con el equipo del supuestamente extinto, grupo de granaderos.
“De norte a sur de este a oeste, ganaremos esta lucha, cueste lo que cueste”, gritaron y marcharon estudiantes de CCH’s, Prepas, Facultades de Economía, Ciencias, Ingeniería, Ciencias Políticas y Sociales, la ESIME y la ESCA del Poli. También se unieron organizaciones obreras, campesinas y políticas.
Y así, llegaron al Zócalo donde comenzó el mitin final. Ahí tomaron la palabra los padres y madres de los 43 de Ayotzinapa, y recordaron que cuando sucedió la desaparición de los estudiantes fue en el momento en que intentaban secuestrar autobuses para trasladarse a la movilización del 2 de octubre de 2014.
“Debemos estar juntos para seguir luchando, seguir gritando por esta masacre que sucedió en Tlatelolco a 51 años. Seguimos pidiendo justicia y castigo para las personas que participaron y sean responsables. Aquí estamos los 43 padres que también nos han visto que no hemos parado, seguimos adelante. Han pasado 5 años y unos días de la desaparición de lo 43 y hasta la fecha no sabemos nada”. Padre normalista desaparecido Ayotzinapa
Creación de una Fiscalía especial, principal demanda
El Comité 68 exigió la creación de una fiscalía especial para investigar la matanza de Tlatelolco, y retomar los trabajos de la extinta Fiscalía de Movimientos Sociales del Pasado, pues han transcurrido más de 5 décadas de lucha contra la impunidad. Esta exigencia, que se hizo desde el año pasado al presidente Andrés Manuel López Obrador, misma que sucedió durante toda la marcha de hoy.
“Es increíble que en México, el 5to Tribunal Colegiado haya establecido en una sentencia de amparo que lo ocurrido el 2 de octubre fue un genocidio, pero ahora desgraciadamente, no hay un solo genocida preso. Fuera de Luis Echeverría –que estuvo en prisión domiciliaria dos años–, no hay ningún otro que haya sufrido la consecuencia de sus actos de aquella masacre”. Comité 68
La demanda es por la creación de una nueva fiscalía también para sancionar a los integrantes del Batallón Olimpia, mandos militares y a policías federal que aún se encuentran con vida.
Al momento, continúa realizándose el mitin final en la plancha del Zócalo. Y aunque se registraron algunos incidentes entre los manifestantes radicales, el cinturón de paz y medios de comunicación; así como pintas en algunos lugares de la protesta, no ha habido agresiones mayores.
Fotografía: Nancy Gómez/SDPnoticias