Por Jorge Narváez.
Y no contaban con la astucia de las tigrillas. Cuando ya todos estaban cansados de criticar a Tigres Varonil y que el tema de su poca solidaridad ya se estaba olvidando, las Tigres Femenil aplicaron la de “quítate que ahí te voy”.
Fingir una lesión para distraer la jugada que terminó en gol, provocó nuevamente que Tigres estuviera en boca de todos, ahora no pasó a medios internacionales y sólo se quedó en México… por fortuna.
Algo serio pasa en ese equipo y no se necesita ser parte del club para confirmarlo, las acciones y declaraciones son tan evidentes.
El lunes pasado la jugadora María Elizondo de Tigres terminó por hundir la gran imagen que habían logrado el personal de marketing, al fingir una lesión, generando que la portera de León se acercara a auxiliarla, pero la jugada nunca paró y eso fue aprovechado por Karen Luna para anotar el gol de la victoria.
Existe la polémica que el juego nunca se detuvo y que Tigres estaba en su derecho de seguir el partido, pero nuevamente aquí se trata de solidaridad, y peor aún, que Karen no detuvo el juego para ver el estado de salud de su compañera.
Bien pudo mandar el balón afuera de juego, para que ingresaran los médicos, pero prefirió enviarlo a las redes cuando la portera de León si se preocupó y se acercó a la jugadora rival.
Sobre este acto, apareció Elizondo a declarar que no vio la trayectoria del balón y que, cuando se levantó, el esférico ya estaba en la portería, pero sí festejó junto a sus compañeras.
Club Tigres necesita realizar más campañas con jugadores, de esas que hacen en hospitales, para poder medio limpiar su imagen fuera de las canchas, porque dentro del campo, eso sí, todavía son un monstruo, un equipo de los grandes.
Fotografía: archivo/ Mexsport/ Oncediario