Por José Jaime Ruiz
@ruizjosejaime
¿El municipio de Escobedo se encuentra en el estado mexicano de Nuevo León o en el estado norteamericano de Nueva York?
La alcaldesa del municipio, Clara Luz Flores Carrales –una de las más fuertes candidatas a la gubernatura– cometió, tal vez, su primer error al colocar ocho cabinas sanitizantes, las primeras a la entrada y salida de la estación Sendero del metro regio. Hasta ahora Clara Luz se había mostrado con un perfil serio, chambeador, ecuánime, sin espectacularidad.
Los túneles sanitizantes cambiaron el anterior modelo. ¿De qué se trata?
“Ante la emergencia del #Coronavirus, reforzamos medidas de protección para los trabajadores y sus familias. Ocho túneles sanitizantes se han instalado en puntos de mayor afluencia y quienes caminan por ahí son rociados con sustancias especiales cuyo efecto dura 12 horas. Estas acciones distintivas conforman la estrategia emergente de #Escobedo que se implementa para enfrentar la pandemia del #Covid-19”, declaró la alcaldesa.
Las cabinas no tienen sentido cuando de lo que se trata, primero, es quedarse en casa y, segundo, no suplen las medidas de precaución cuando se llega a casa, a pesar de que su “efecto” desinfectante dure 12 horas. Porque la movilidad no se agota saliendo del túnel, sigue y desinfectar no equivale a inmunizar. Tapabocas y guantes en las calles, gel en el bolsillo, ya en casa hay que quitarse los zapatos en la entrada, guardar la ropa usada en bolsas de plástico para lavarla, lavarse con fruición manos y brazos o bañarse, entre otras recomendaciones.
La misma descripción contradice el uso público que se le da a los túneles desinfectantes. Sirve para entradas, no para salidas: “De acuerdo a la emergencia sanitaria se implemente en el siguiente módulo inflable un sistema nebulizador desinfectante automatizado para desinfectar el 99.9% de superficies en el ACCESO a lugares con alto flujo de gente capaz de eliminar, virus, bacterias, hongos, esporas, microbacterias y agente patógenos que se encuentren en el medio ambiente, desinfectando así ropa, cabello u objetos que crucen por el túnel”.
Son ideales para los accesos, no para las salidas de nuevo a la movilidad. De todos los lugares recomendables, y por el “quédate en casa”, sólo sirven para acceder a farmacias, hospitales, industrias, oficinas y supermercados. Y, si realmente funcionaran, las habríamos visto masivamente en Seúl, Berlín, Madrid, Roma, Tokio, Hong Kong, Londres, París y en las ciudades más importantes, demográficamente, del planeta. ¿Cuánto hay que pagar por el chistecito?
El coronavirus es cosa seria. Las medidas espectaculares caen en la frivolidad. Hay vivales que quieren hacer su agosto en abril, ya hasta convencieron al alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, de poner una cabina a la entrada del palacio municipal. Las recomendaciones serias del sector salud ahí están. Inventar soluciones frívolas de mitigación en poco ayuda.