Reino Unido y la Unión Europea mantuvieron hoy una nueva ronda de negociacones sobre la salida británica del eurogrupo, en la cual Londres ratificó que el periodo de transición debe terminar el 31 de diciembre de este año como está previsto.
La negociación estuvo a cargo del europeo Michel Barnier y su contraparte David Frost, en una ronda llevada mediante teleconferencia, describió la vesión europea del sitio informativo Politico.
Hasta ahora ambas partes deberían de haber realizado dos rondas sobre las características de la finalización de ese periodo de transición, luego de que la salida formal se concretó el pasado 31 de diciembre, sin embago fueron canceladas por la pandemia en curso.
Desde el 1 de enero solo se ha celebrado el primer encuentro negociador, pues la expansión del COVID-19 que ha afectado con fuerza a países europeos como Italia, Francia o España, ha obligado a la cancelación de la segunda y la tercera rondas.
Además, los dos negociadores anunciaron hace algunos semanas que registraban síntomas de la enfermedad, lo que agregó más días de espera, mientras las teleconferencias han despertado reticencias en materia de seguridad, por lo que no han sustituido al diálogo cara a cara.
También han aparecido detalles que han parecido imposibles de resolver. En la última ronda presencial participaron alrededor de 200 expertos de ambas partes en 11 mesas diferentes, lo que ha sido difícil de replicar en línea.
Se trabaja hasta donde es posible dadas las circunstancias, pero no es posible alcanzar la misma dinámica en los encuentros virtuales, dijeron fuente de la UE.
Por lo pronto habrá una nueva teleconferencia el próximo martes 20 de abril, pero fuentes eurocomunitarias dijeron a Politico Europa que «si tu casa se está incendiando, tienes una sola prioridad».
A nivel de expertos que negocian los detalles del periodo de transición, los encuentros vía teleconferencia han continuado, pero la parte de alcanzar acuerdos está suspendida.
Por ello seguirían pendientes de resolver las «muy serias divergencias» que Barnier afirmó existían a principios de marzo, sin que haya habido avances.
La UE ha enviado a Londres un borrador completo de un texto de acuerdo, pero la contraparte británica no ha hecho lo mismo, y solo ha presentado textos parciales a Bruselas.
En ese marco la parte eurocomunitaria ha insistido en la conveniencia de llevar el periodo de tranición más allá del 31 de diciembre de este año, en particular lo han pedido la bancada más grande del Parlamento Europeo, la del Partido del Pueblo de Europa.
Para los negociadores europeos, la perspectiva de la dura recesión que espera al mundo por la actual pandemia hace absurdo llevar más presión a la economía británica por la ruta de no alcanzar el acuerdo final de salida de la UE.
Pero del lado británico la posición ha sido inamovible, aunque la última declaración al respecto fue hecha hace un mes, a mediados de marzo, cuando la situación no era la misma que la actual.
