Miedo, angustia y soledad son las emociones que se viven diariamente en los hospitales del mundo ante la pandemia de coronavirus. Pero también en ese ambiente ocurren historias de amor extraordinarias, como la de una pareja que tras 15 años de relación, pudo casarse horas antes de que el novio muriera de Covid-19.
Los hechos sucedieron hace unos días, en el Hospital Bradford Royal, de Reino Unido, donde el doctor John Wright, registra en un diario para la BBC, lo que ocurre en las diferentes salas del nosocomio.
Por falta de tiempo y dinero, no habían podido casarse
La enfermera Sophie Bryant-Miles le contó que en uno de sus turnos nocturnos en la Sala Uno, le tocó atender el caso de un joven con varios trastornos médicos y bajo sospecha de Covid-19.
Sus posibilidades de sobrevivir eran mínimas, por lo que ya recibía cuidados paliativos.
A su lado, vestida de pies a cabeza con equipo médico de protección, estaba su novia por 15 años y ahora prometida, quien había contado al personal de Salud que nunca habían tenido ni tiempo ni dinero para casarse.
Enfermera organiza su boda
Ante la gravedad del paciente, cuyo diagnóstico era que no sobreviviría la noche, la enfermera Sophie decidió llamar al capellán del hospital, Joe Fielder, para pedirle que casara a la pareja de inmediato.
Joe dijo que solo podía realizar un servicio y celebración de compromisos, similar a una boda, con anillos, intercambio de votos y demás cosas, pero sin valor legal.
Los enamorados aceptaron, entonces el personal médico decidió hacerles un par de argollas matrimoniales con papel aluminio, contactaron vía FaceTime a la hija del paciente para “acudir” a la ceremonia, e incluso consiguieron pastel.
Se dieron el «sí, acepto» entre médicos protegidos de pies a cabeza
Entre médicos y enfermeras que portaban visores, cubrebocas y delantales, mientras decían las oraciones correspondientes, los novios por más de una década se declararon su amor por última vez, para convertirse en marido y mujer.
Aunque al novio le costó decir su parte por la falta de aire, lo mismo que a la novia por el llanto de la emoción, ésta agradeció a todo el personal del hospital por sus atenciones. Horas más tarde su esposo murió.