Por José Jaime Ruiz
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@ruizjosejaime
Las encuestas de hoy serán el desastre de mañana. En este momento es relevante encontrar los negativos, porque esos difícilmente cambian. Algunas encuestas que “benefician”, por ejemplo, al senador Samuel García, “sólo” muestran negativos del 25 por ciento, en realidad, los negativos de Samuel llegan al 60 por ciento, imposible que sea gobernador. Si cualquier encuesta no muestra los negativos, de poco vale.
Para el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, los negativos siguen estables, un poco arriba del 20 por ciento, lo cual casi empata sus positivos. Adrián ya sabe que llegó a su techo, es difícil que tenga más puntos o intención de voto. Adrián a duras penas pudo ganar Monterrey, ¿qué le hace pensar que ganará Nuevo León? Y todavía no empieza la guerra negativa, o sucia, según se vea. ¿Se documentarán relaciones ominosas con los intereses de su hermano Filiberto?
Clara Luz Flores Carrales no va en caballo de hacienda, a pesar de que Morena, inicialmente, la aceptó. Si Tatiana Clouthier no logra la candidatura, será un cadillo en contra de Clara Luz. Si Flores Carrales piensa que la Tía Tatis se va a “disciplinar”, se equivoca. Como política, Clara Luz no tiene negativos destacables, pero ya empezó la guerra sucia en su contra a través de su esposo Abel Guerra, mantas inventadas y otros golpeteos. ¿Quién paga esas campañas negativas? Pronto saldrán los responsables.
El PAN decidirá su candidatura estirando la liga hasta donde pueda, se les reventará y, según esta ruta, cada vez tendrán menos capacidad de negociación. Zeferino Salgado y Raúl Gracia optan por su sobrevivencia. Víctor Pérez podrá intentar otras negociaciones, sin Chefo y Raúl.
Este es el escenario en el cual entra Ildefonso Guajardo. El PRI medinista no es opción, el otro PRI, el tradicional y pragmático, sí lo es. Un PRI que se decantaría, veamos el futuro, por Movimiento Ciudadano y el Partido del Trabajo. Ildefonso aún no habla con Dante Delgado y Alberto Anaya, pero lo buscarán o se buscarán. La primera carta de Ildefonso es la credibilidad: todos, inclusive sus adversarios, admiten que puede ser un excelente gobernador.
Ildefonso empezó una campaña fresca, incluyente y sorpresiva: dejó de ser un eficiente burócrata para ser un candidato. Quien entienda de política sabrá que Ildefonso estará en la boleta y, sin negativos evidentes, cada vez más presente. Quien fue un factor importante para negociar el Tratado de Libre Comercio sabe lo que es una política de composición. ¿Alguien imagina a Ildefonso siendo candidato de MC y PT con Luis Donaldo Colosio Riojas como candidato a Monterrey?
Las próximas semanas son cruciales. Además de reconocido, Ildefonso Guajardo tiene que ser un político conocido. Quien dude que Ildefonso será opción en el 2021, se equivoca.