El Fondo Monetario Internacional (FMI) recomendó al Gobierno de México que se posponga la construcción la refinería Dos Bocas hasta que sea rentable hacerlo.
El organismo consideró que Petróleos Mexicanos (Pemex) debería vender sus activos no básicos, aquellos que no son necesarios para las operaciones comerciales de esta, y enfocarse sólo en campos rentables.
El FMI sugirió ampliar la estrategia de apoyar la recuperación por la crisis del coronavirus, así como una reforma tributaria y reorientar el gasto público.
En este contexto, sostuvo que una forma de mejorar el funcionamiento financiero de Pemex es asociarse con empresas privadas para obtener capital y conocimientos.
La refinería Dos Bocas es uno de los proyectos insignias del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) que está pensado en lograr autosuficiencia en la producción de gasolinas y diésel.
El mandatario federal ha señalado que la planta tendrá la capacidad de generar 340 mil barriles por día. El presupuesto asignado para la obra es de 8 mil millones de dólares en un lapso de 3 años.
El FMI indicó que México tiene espacio para reducir todavía más su tasa de interés referencial, lo que daría un “mayor alivio” a la economía.
El Banco de México (Banxico) fijó, a finales de septiembre, la tasa de interés clave en 4.25 por ciento, mencionando que los retos derivados de la pandemia de coronavirus incluyen una importante afectación a la economía, así como un choque financiero y sus efectos sobre la inflación.
Ante ello, el FMI mejoró su perspectiva de crecimiento para México, pasando de -10.5 por ciento a una caída de 9 por ciento en 2020.
El organismo indicó que con base a estas proyecciones, el empleo, el ingreso y la pobreza van a tardar varios años en volver al nivel previo a la pandemia del Covid-19.
Al señalar que la construcción de la nueva refinería Dos Bocas, que se construye en Tabasco, deberían posponerse, el FMI dijo que la economía del país necesita más apoyo fiscal en lo inmediato.
