El alcalde Jonathan Ávalos Rodríguez del municipio de Francisco I. Madero en Coahuila, propuso tratar el coronavirus (Covid-19) con dióxido de cloro, pese a que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) desaconseja su uso debido a que podría ocasionar “graves efectos adversos”.
A través de un video compartido en su cuenta de Facebook, el alcalde quien también es médico, defendió su decisión afirmando que no podía “estar viendo morir tanta gente” y propuso comenzar con la distribución de mil dosis del dióxido de cloro a voluntarios que se hubieran contagiado de Covid-19.
El anuncio lo hizo el jueves 19 de noviembre y las dosis del ‘tratamiento’ se albergarán en el Centro Regional de Atención a la Salud del Ayuntamiento para quienes llegasen a presentar síntomas, una vez que arribaran el día viernes 20 de noviembre.
Para acceder de forma gratuita a las dosis de dióxido de cloro, los pacientes deberían firmar una hoja de “consentimiento informado” al afirmar que el tratamiento curaba al observar él mismo “cambios en menos de 2 horas” y que no descansaría hasta que cada poblador se recuperara del Covid-19.
Tras la difusión del video del alcalde en Coahuila, la Secretaría de Salud estatal emitió un comunicado donde aclaró que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) no ha autorizado registros sanitarios para medicamentos que contengan dióxido de cloro.
De hecho, consideró a dichos productos como “milagro” para el tratamiento de pacientes con coronavirus puesto que su uso indebido representa un riesgo para la salud de quienes lo consumen y llamo a que las autoridades sigan las indicaciones establecidas por las autoridades sanitarias federales.
La Secretaría de Salud de Coahuila advirtió que los promotores de las sustancias de dióxido de cloro se harán acreedores a multas que establece la Ley General de Salud Federal y Estatal, por lo que si las autoridades promueven dichas acciones y afectan la salud de los pacientes recibirán penalizaciones a partir de los parámetros.
Las sanciones involucran el aseguramiento del producto, información engañosa y consecuencias penales como la cárcel para los responsables, por lo que conminó a la población a levantar una denuncia sanitaria en contra de establecimientos o personas que lo oferten como alternativa terapéutica frente al Covid-19
El dióxido de cloro es un gas de color amarillo o amarillo-rojizo que se emplea como blanqueador para la fabricación de papel y el procesamiento de agua. Cuando entra en contacto con el agua forma iones clorito, dado que es muy reactivo provoca irritación de la boca y el estómago, náuseas, vómito y diarrea.