En el Aeropuerto Internacional de Shenzhen en el sur de China hay una fila de cámaras blancas, de 350 metros, con una pantalla que muestra la temperatura en el interior.
Este es el lugar donde estarán las vacunas contra Covid-19 y que serán enviadas a diferentes países con quienes ya se hicieron convenios, de acuerdo con CNN.
Para entrar al lugar, la persona debe cubrirse de pies a cabeza: portar cubrebocas, bata quirúrgica, guantes de goma monta guardia, traje de protección y tuvo que estar dos semanas de cuarentena.
Hasta el momento hay cinco vacunas contra el nuevo coronavirus que se están analizando en el país, podrían aprobarse en los próximos meses y ser enviadas a los 16 países que ya las compraron.
CanSino Biologics, que está en la fase 3, tiene acordado entregar 35 millones de dosis a México, donde se están llevando a cabo pruebas.
Sinovac Biotech tiene un acuerdo para entregar 46 millones de dosis a Brasil, 50 millones de dosis a Turquía y 40 millones a granel (el concentrado de vacuna antes de ser envasado) a Indonesia para su producción.
China National Biotec Group (CNBG) está haciendo ensayos de fase 3 en 10 países de Oriente Medio y Sudamérica, señala CNN.
Por el momento ninguna de las candidatas a vacunas más avanzadas ha mostrado cuál es su eficacia, en comparación con la de Pfizer/BioNTech, AstraZeneca y Moderna, que ya están buscando su aprobación en Estados Unidos para aplicarse a las personas antes de que termine el año.
Las vacunas experimentales en China tienen una ventaja con las de Pfizer y Moderna: no necesitan refrigerarse a extremas bajas temperaturas,por lo que es más fácil su transportación y distribución.
El investigador principal de salud global del Consejo de Relaciones Exteriores con sede en Washington, Yanzhong Huang, mencionó que China, además de voluntad política, tiene la capacidad para entregar las vacunas.
