La reapertura de establecimientos y comercios durante el fin de semana peligra ante el incremento en los indicadores del Semáforo Epidemiológico, indicó el gobernador Jaime Rodríguez Calderón.
En entrevista, al término de un evento público, recordó que la decisión se toma con base a la incidencia, la cual depende del comportamiento de la población.
«Quien sabe (si se mantengan abiertos los negocios este fin de semana), voy a revisar los números mañana».
«No hay garantía (de que se mantengan abiertos), no hay garantía. Si los contagios suben vamos a cerrar», resaltó.
A lo largo de la última semana se dispararon las aglomeraciones en establecimientos y comercios derivado de las compras navideñas.
Pese a la recomendación de quedarse en casa y comprar en línea, la población prefirió volcarse a las calles. Aplicar la sana distancia y evitar congregaciones de personas, tampoco fueron atendidas.
«La época navideña es una de las tradiciones más celebradas en nuestro estado y, como en muchas partes del mundo, esta temporada se aprovecha para convivir con amigos y familiares, pero no olvidemos que este año no es igual a los anteriores; este año nos ha marcado para siempre».
«Quiero pedirles una vez más no bajar la guardia. Cuidemos a las personas vulnerables pero sobre todo evitemos visitarlas. Esta Navidad convivan solo con las personas con las que viven. No pasa nada si este año les hacemos una videollamada o una llamada a nuestros familiares», añadió en sus redes sociales.
NO CESAN LAS AGLOMERACIONES
A unas horas de Navidad, como cada año y pese a las restricciones sanitarias por el Covid-19, los regios abarrotaron ayer el primer cuadro de la ciudad en busca del mejor regalo y lo último para la cena de Noche Buena.
La ampliación de banquetas no fue suficiente para dar cabida a los miles de personas que se volcaron a la zona centro en compras de pánico, haciendo del transitar casi una misión imposible.
Centros comerciales, tiendas departamentales y demás establecimientos lucieron con aglomeraciones desde tempranas horas y durante el transcurso del día.
Alrededor de las 09:00 horas se intensificó el movimiento que para el mediodía se tornó en un completo caos.
El tráfico vehicular y el paso de transeúntes saturaron al máximo calles como Juárez, Morelos, Juan Ignacio Ramón, 5 de Mayo, Colegio Civil, Garibaldi y 15 de Mayo.
En espacios cerrados, la sana distancia al exterior brilló por su ausencia.
Juguetes y ropa estuvieron entre los artículos más demandados en tiendas que lucieron largas filas.
También se incumplió con las recomendaciones de acudir una persona por familia, evitar la salida de niños menores de 12 años y adultos mayores, o privilegiar las compras por internet.
Como punto a favor, en la mayoría de los comercios se toma la temperatura, aplican gel antibacterial y respetan el aforo establecido del 30 por ciento.
Elementos de la Policía Regia, Fuerza Civil, y agentes de Vialidad y Tránsito, incluyendo cadetes, lucharon por mantener el orden. Fue hasta las 21: 00 horas que la aglomeración comenzó a disiparse.