Tras varias horas de debate, el Senado de Argentina votó a favor de permitir el acceso libre y legal al aborto hasta la semana 14 de gestación.
La decisión de despenalizar el aborto en Argentina se tomó con 38 votos a favor, 29 en contra y una abstención. Cuatro senadores no asistieron.
Afuera del Congreso, las personas en favor del aborto celebraron la aprobación del proyecto de ley. Miles de ciudadanos se habían reunido desde temprano el martes 29 de diciembre, a la espera de una votación que se prolongó durante varias horas.
Después de la aprobación del Senado, el proyecto de ley será enviado al presidente de Argentina Alberto Fernández para su promulgación, pues en un inicio fue presentado por su gobierno, además de ser una de sus promesas de campaña.
De ese modo, Argentina se integra a Cuba, Uruguay y Guyana como los únicos tres países de América Latina en donde el aborto es legal. En México, sólo es legal en la Ciudad de México.
En la actualidad, el aborto se considera un delito penado con hasta cuatro años en prisión excepto en caso de violación o de riesgo para la vida de la madre, desde el año 1921.
En 2018 se presentó un proyecto similar de interrupción voluntaria del embarazo y la Cámara de Diputados lo aprobó con 129 votos a favor, 125 en contra, pero el Senado lo rechazó. A diferencia de aquella ocasión, esta vez la iniciativa fue impulsada por el presidente Alberto Fernández.
Proyectos del aborto en Argentina
La iniciativa de despanlización del aborto presentado por el gobierno del presidente Alberto Fernández y que aprobaron hoy los senadores, consta de dos proyectos:
- Uno que regula la interrupción voluntaria del embarazo y la atención postaborto.
- Otro que se llama «Mil Días” y propone una serie de medidas para acompañar a las mujeres que deciden seguir adelante con un proyecto de maternidad.
De acuerdo con el proyecto principal que envió el Ejecutivo regula que las mujeres y «otras identidades con capacidad de gestar” puedan acceder a la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 14 y a la atención postaborto para evitar muertes.
Según la norma, desde el requerimiento hasta su realización, no pueden pasar más de 10 días. También, se deberá asegurar un trato digno, privacidad, confidencialidad, autonomía de la voluntad y acceso a la información.
La iniciativa considera la objeción de conciencia individual o de un establecimiento de salud; sin embargo, los objetores tendrán obligación de derivar a la paciente a otro centro hospitalario.
El texto sobre le despenalización del aborto en Argentina subraya el derecho a recibir educación sexual integral y a métodos anticonceptivos para prevenir embarazos no deseados.