Por Obed Campos
Apurad
Que allí os espero si queréis venir
Pues cae la noche y ya se van
Nuestras miserias a dormir
«Fiesta». Joan Manuel Serrat
Hoy es la noche de San Silvestre y muchos ilusos ya se mandaron comprar los calzones rojos y el puñado de uvas, porque, pandemia o no, la celebración por el año que se acaba y el año que llega, no se va a hacer a un lado.
Ya lo verá que van a ser menos, pero de todos modos habrá cuetes y tiros al aire… y por supuesto menos, pero habrá bacanales y bailes y desenfreno.
Una familiar mía recomienda que en vez de encender fuegos de artificio a las 11:59 habríamos de practicar un minuto de silencio en conmemoración de todos los que se nos fueron en el fatídico 2020 y también por los que están en plena lucha por sus vidas y por los que los cuidan.
Es cierto, el miedo al Covid-19 ronda las calles, pero la mayoría no lo siente y prefieren a esperar a ver la cuesta de enero… La pregunta es si viviremos para la cuesta de enero…
¿A qué número llegarán las cifras de infectados para la próxima quincena?
Yo creo que no hay nada qué celebrar, pero sí mucho que agradecer, al menos de los que estamos sanos y salvos.
A mediados de noviembre pasado mi esposa y yo resultamos infectados de Covid. Por fortuna tuvimos el gran apoyo de los hijos y la profesional atención médica disponible.
Por eso le digo que el Covid no se le desea ni al peor de los enemigos, ya ve usted que los creyentes de la teoría de la conspiración dicen que fue creado como arma biológica.
Pero el caso es que esta noche usted puede celebrar todo lo que quiera, pero con mesura y guardando la sana distancia podrá disfrutar de los tamales el Día de la Candelaria.
Si no se cuida, pues no.
Feliz 2021 a usted y su familia.
Y sí, que el 2021 venga a borrar nuestras penas…