Por Francisco Tijerina Elguezabal
“Una cosa es ser conocido y otra que te tengan confianza.” Yomero
Los partidos políticos no entienden.
La fórmula de postular a “famosos” únicamente da algunos resultados cuando esos personajes están en su apogeo y aún así la popularidad no es sinónimo de votos en las urnas.
Por años el PRI utilizó como candidatos a verdaderas estrellas del deporte y los espectáculos, pero hablo de íconos, personajes vigentes en su momento, no estrellitas locales ni quienes tuvieron fama hace muchos años.
Hoy el PES informa que tendrá como candidato a diputado a Francisco Javier “El Abuelo” Cruz, gran futbolista en su tiempo, pero sucede que su tiempo fue hace mucho tiempo ya y de él pocos se acuerdan.
En su momento Tomás Boy fue candidato y los votos que obtuvo fueron mínimos.
En cada elección “El Pato” Zambrano obtiene una cantidad menor de sufragios que en la anterior, pero ahí sigue terqueando y le puedo anticipar que conseguirán muchos más votos en su cuenta Anita González o Fernando Lozano.
Pero insisto, ser populares no les da garantía alguna de voto; ya lo vio usted la campaña pasada cuando Poncho Denigris anduvo recorriendo calles y haciendo eventos para colarse a algún puesto; antes Juan Ramón Palacios, el conductor de TV anduvo también pidiendo el voto.
“El Abuelo” es un futbolista reconocido y recordado por sus méritos, pero no un personaje famoso en nuestro tiempo y así será su nombre igual al resto de los que aparezcan en la boleta, un nombre más, por lo que corresponderá al impulso y soporte que le brinde su campaña el resultado que obtenga en las urnas.
Y es aquí donde el asunto se pone mucho más interesante, porque al vivir en medio de una pandemia los métodos tradicionales de campaña quedarán desechados; ya no habrá recorridos y mítines, reuniones masivas y visitas a domicilios. Hoy todo será a distancia y utilizando al máximo los medios de comunicación y las redes sociales.
Le pronostico que los artistas, deportistas y famosos obtendrán muchos likes, pero pocos votos por la simple razón de que las circunstancias nos han hecho un pueblo mucho más informado y por tanto mucho más selectivo, de manera que la experiencia de este tipo de candidatos será cada vez más cuestionada y revisada con lupa por los votantes.
Ojalá que tenga suerte “El Abuelo”, porque la va a necesitar si es que verdaderamente quiere hacer un papel a la altura de sus hazañas como futbolista de hace muchas décadas.