La Asociación de Transporte Público de Nuevo León se declaró imposibilitada para aumentar la frecuencia de paso de las diferentes rutas urbanas, ya que cuenta con más de 600 unidades detenidas en los talleres. Durante el transcurso de la tarde de este miércoles, se pudo observar que la mayoría de los camiones que transitan por el área metropolitana portan un pegote en el que se disculpan con los usuarios por el servicio deficiente.
«A nuestros usuarios una disculpa, estamos imposibilitados de brindar más servicio»
Se estima que al momento operan sólo 2 mil 700 autobuses, de más de 5 mil que se requiere. Si bien descartó un paro de labores, José Almaraz, vocero de los transportistas, dijo que su situación financiera les impide incorporar más unidades.
«No hay ningún paro de labores. Nosotros no queremos hacer para nada eso. Lo que sí no podemos hacer es meter más unidades porque no hay dinero, no hay recursos para poder sostenerlo.»
«Las condiciones económicas en las que están las empresas no permiten ni siquiera reparar las unidades que tenemos en los talleres. Actualmente nada más están dando servicio no más de 2 mil 700 unidades.»
Detalló que durante la pandemia de Covid-19 se pierden cerca de un millón de viajes diarios, lo que impactó fuertemente en su ya de por si precario escenario financiero.
El próximo regreso a clases presenciales, dijo Almaraz, agudizará aún más la falta de camiones: «En agosto estimamos que va haber clases presenciales y para esa fecha, si ahorita no podemos con el servicio, va estar bastante, bastante mal… La situación lejos de mejorarse se está empeorando cada vez más».