Por Obed Campos.
Alberto Palomino, quien ocupó una vicepresidencia en el área legal de la trasnacional regiomontana Cemex, encabeza ahora una campaña de sí mismo para ocupar un cargo como Magistrado en el Poder Judicial de Nuevo León.
En el Club Tigres, donde nadie supo de su paso, ni de su encargo ni de su chamba, nadie lo recuerda.
Palomino acaba de salir de Cemex, donde, como ya dije, era contralor de Sinergia Deportiva, la empresa que administra al Club de Futbol Tigres. Luego lo enviaron a México y ya quedó fuera de la empresa hará unos dos meses…
Tal vez en su ansiedad de conseguir chamba, es que no está tomando en cuenta que la plaza de la magistratura que está disponible, fue reservada para que la ocupe, por cuestión de género, una mujer, y solamente que Palomino quisiera tomar medidas extraordinarias, no creo que llene el perfil.
Y como digo, ya tiene días con una autocampaña en la que revela que Palomino es la luz del mundo legal en Nuevo León, además de que es lo suficientemente simpático como para caerle bien a todos y cuenta con relaciones políticas y sociales de nivel, así como la experiencia jurídica necesaria.
La campaña hace énfasis a la chamba que realizó en el Club Tigres, donde, como ya dije, pasó con más pena que gloria.
Y ahora que, viendo perfiles de féminas preparadas para el cargo, se ve que damas capaces es lo que más abunda en Nuevo León.
Ahí tiene usted el caso de la abogada Elisa Estrada, quien tiene un amplia experiencia jurídica y legislativa.
Además de que reúne los requisitos de sobra como para hacer un brillante papel en el Poder Judicial como Magistrada, cargo al cual le haría muy bien el toque femenino, pero con el expertise de la joven abogada.
No me queda duda que la tarea le queda pintadita a Elisa, quien, de salir favorecida con semejante encargo, haría un papel más que excepcional, y demostraría, una vez más, que las mujeres de Nuevo León sí pueden.
No sé si ya se lo propusieron, pero Elisa es lo suficientemente discreta para que, de ser así, no dar señal alguna.