Por Francisco Tijerina Elguezabal

“La humanidad es como es. No se trata de cambiarla, sino de conocerla”
Gustave Flaubert

Primero un par de indocumentados pelean entre sí, y cuando quiere poner orden, un sacerdote en Monterrey es golpeado por uno de ellos.

Luego un agente del Instituto Nacional de Migración que transportaba a 13 centroamericanos fue agredido en Tuxtla Gutiérrez, rescatando a los inmigrantes y dejando herido al oficial mexicano.

Una cosa es ser humanitarios y ayudar al prójimo y otra, muy distinta, es tolerar este tipo de desplantes o actitudes.

Sí, sabemos que en sus lugares de origen tienen muchos problemas y sufren, pero eso no les da ningún derecho de venir a nuestro país a dar problemas, a atentar contra nuestros compatriotas y mucho menos tenemos obligación alguna de aguantar sus insultos y agravios.

Se les ayuda, se les apoya en la medida de las posibilidades, encuentran la solidaridad de un pueblo bueno y generoso, pero no existe ninguna obligación de nuestra parte en brindarles ninguna facilidad, por lo que sus bloqueos y plantones, sus marchas y manifestaciones, amén de sus agresiones a personas, no tienen razón de ser.

Va siendo tiempo que nuestras autoridades pongan un sonoro y severo “¡hasta aquí!” para dejar en claro que somos buenos, pero no somos tontos ni dejados, que una cosa es la humanidad y otra, muy distinta, el que nos pasemos de buenas gentes.

Simple y claro, a los propios mexicanos no nos tienen tanta paciencia. ¿Por qué diantres les aguantamos tanto a quienes no han nacido en este suelo?

ftijerin@rtvnews.com