En el verano de 2020, una mujer a la que se conoce únicamente por el nombre de Danielle emprendió acciones legales contra Justin Bieber, acusándolo de agredirla sexualmente en un hotel en Texas el 9 de marzo de 2014, y él respondió presentando su propia demanda contra ella por difamación. Poco después, una segunda supuesta víctima llamada Khadidja rompió el silencio a través de las redes sociales para asegurar que el artista también la había agredido en otro hotel en mayo de 2015.
La estrella del pop siempre ha mantenido su inocencia y le reclama diez millones de dólares a cada una de las jóvenes por daños y perjuicios. También sostiene que puede demostrar que, en el momento en que ocurrió la supuesta agresión contra Danielle, él se encontraba con su entonces novia Selena Gomez, y afirma que existen tanto testigos como pruebas fotográficas de que el 5 de mayo de 2015 se encontraba en Nueva York, en una de las fiestas posteriores a la gala del Met, durante las horas en que Khadidja afirma que abusó de ella en el hotel Langham.
Según los documentos obtenidos por el portal Radar Online, el pasado mes de noviembre tanto Justin como Daniella acordaron resolver el pleito en una mediación privada sin llegar a juicio. En lo que respecta a su batalla legal con Khadidja, ella solicitó hace unas semanas que se desestimara la demanda del famoso intérprete alegando que no había dañado la reputación de la estrella del pop y que sus comentarios sobre él no eran difamatorios.