Con una inversión de 30 millones de pesos, este domingo, el Gobierno del Estado junto con el municipio de Monterrey iniciaron la remodelación de la Macroplaza.
El Gobernador del Estado, Samuel García Sepúlveda señaló que este importante centro turístico necesita de una fuerte mano de gato, porque sus estructuras cuentan con severos daños.
Indicó que junto con el alcalde Luis Donaldo Colosio Riojas, la idea es dejarla igual o más bonita de cuando fue inaugurada.
Para tal efecto, dijo que la administración a su cargo llevara los trabajos en seis etapas, para que en el 2026 esté terminado el proyecto.
«Vamos a remodelar y dejar como nueva la Macroplaza, este lugar es parte de fundidora y como nuestra Constitución señala que ahora si habrá el derecho humano al espacio público a la recreación, al ocio, vamos a invertir de manera sustentable al Parque fundidora en seis etapas una por año para tener el Gran Parque Nuevo León en el 2026″.
«Antes de que llegue el mundial y ande aquí todo mundo apreciando la FIFA, esta primera etapa junto con Colosio el alcalde Monterrey que ambos tenemos este patio central volver a dejarla hermosa como cuando se inauguró, volver a tener espacio asequible, arboles, bebederos, comercios sustentables», aseveró.
El mandatario estatal dijo que una de las principales atracciones turísticas de Nuevo León era una vergüenza.
«Ahorita da pena, yo todos los días paso por aquí parece que se están cayendo las estructuras, todos los tubos manchados, eso Nuevo León no lo va a permitir, aunque así nos los dejaron, ya estamos en pláticas con el presidente y con el director de Fundidora para este mismo miércoles iniciar al 100 por ciento la remodelación de toda la Macroplaza ya que es el centro cívico de nuestro estado», indicó.
La Macroplaza o Gran Plaza es la plaza de la ciudad de Monterrey en México y se le denomina así a la parte central de Monterrey que ocupa 40 hectáreas, actualmente es la plaza más grande de México y la quinta plaza más grande del mundo.
La plaza fue construida a inicios de los años 1980 por iniciativa del entonces gobernador del estado de Nuevo León, Alfonso Martínez Domínguez.
Desde entonces a la fecha, la Macroplaza sólo a sufrido algunos cambios superficiales, pero nada de mantenimiento.
Esto ha ocasionado que algunas áreas verdes hayan desaparecido, que algunas bancas estén destruidas y las estructuras cuenten con severos daños.
