Por Obed Campos
“Alguien sabe cuánto está pagando Samuel por irse a Movimiento Ciudadano. Es que tengo un pago vencido en Coppel”
Anónimo en redes
Una querida amiga a quien le debo tanto escribió ayer: “Es lunes, pero no hay agua en Monterrey; viviremos de los planes fantásticos y las condenas a administraciones anteriores, hasta que nos maten la sed, el hambre, la contaminación, la desesperanza…”
Yo le agregué que igual nos puede matar una bala perdida de alguno de tantos imbéciles que andan armados en macolla.
Y lo que a media mañana fue una noticia que dejaba cierta amargura, por aquello de que los mensos siempre se salen con la suya, como potro desbocado cambió de rumbo y en la tarde el inefable Waldo Fernández salió con “que dijo mi mamá que siempre no”.
Es decir, el autoproclamado héroe de mil batallas salió con que habían sido “rumores” la especie de que se iba a la Ciudad de México, en alfombra voladora (por supuesto) a ocupar un super cargo nada más por debajo del Peje.
Waldo, que ha sabido ofrecer a esta vida pública de nuestro México espejitos y brillitos, nos dejó con las ganas de ya no saber de sus ocurrencias.
“Yo me quedo en Nuevo León y me quedo con Morena en el Congreso Local. Desde ahí seguiré peleando por los abusos cometidos por este producto chatarra que ahora se desintegra que es el McPRIAN” dijo Waldo como para que se impriman en letras de oro sus palabras…
Y rimbombante subrayó: “Vivimos en una época en la que los ciudadanos cada vez se sienten más traicionados; por políticos que sólo ven por sus intereses y aseguran aumentos por todos lados, y partidos que traicionan a los ciudadanos” ¿Deveras?
Porque los tipos de la calaña de Waldo nos quieren vender que para ellos “servirnos” a los ciudadanos es un placer. Y hasta hacen la finta de que regalan sus sueldos, cuando las ganancias están en otra parte, no tan lejana para ellos.
O qué joven ambicioso le va a pegar al franciscano en estos tiempos de consumismo en carne viva, para negarse a recibir unos centavos.
Y el que más lloró fue Alfredo Bernal, el ambicioso ex panista suplente de Waldo en el Congreso del Estado por Movimiento Ciudadano, quien soñaba quedarse con la curul de Fernández… Y ya hasta había escogido el modo en el que iba a decorar su oficina con letrero a la puerta y toda la cosa.
Mientras tanto, como dije al principio de este texto, los nuevoleoneses nos tenemos que atener a soportar políticos ropavejeros que se venden puras cosas de segunda y hasta calzones usados que ellos mismos intercambian con una ausencia de pudor…
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