Tras conocerse la cancelación del programa “Agua para Todos” y el anuncio de la implementación de un plan emergente que consiste en tener agua solo en un horario de 04:00 am a 10:00 am todos los días, los restauranteros del estado consideran que esta medida es un duro golpe para este sector; publica MILENIO.
La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), solicitó al gobierno del estado que se pueda disponer de vehículos especiales para la distribución del agua y que se considere la necesidad de los restaurantes como algo primordial con accesibilidad en todos los sentidos para todo el gremio.
Daniel García Rosales, presidente de Canirac Nuevo León, exhortó al gobernador Samuel García y las autoridades correspondientes, a medir el impacto negativo que ocasionará a esta medida a esta industria.
“Si bien es una medida necesaria para extender el servicio a toda la comunidad neoleonesa, representa para nuestra industria un agravante adicional a las múltiples situaciones que hemos venido sorteando desde momentos antes de la pandemia y ahora con esta crisis de agua”, señaló el presidente de Canirac Nuevo León.
“Hacemos un llamado al gobernador Samuel García y a las autoridades correspondientes a que puedan medir este impacto que, sin lugar a duda, representa un retroceso a nuestra actividad empresarial”.
Señaló que para las MiPymes, Pymes es una situación apremiante, pues todos poseen en su nivel, necesidades diversas y diversos alcances económicos; informó MILENIO.
García Rosales expuso que un importante número de restaurantes presentan dificultades dado el mal funcionamiento de equipos de trabajo como los enfriadores, cuartos fríos, hornos especializados que funcionan con trabajo a presión de agua, servicio de abastecimiento, mantenimiento e higienización de las áreas laborales y, sobre todo, la más básica, atención a las áreas de servicio sanitario en cada uno de los establecimientos.
Mencionó que como industria han realizado múltiples inversiones para poder brindar el servicio, primero fue la pandemia donde destinaron recursos económicos para la adquisición de equipos y materiales que ayudaran a cumplir los protocolos sanitarios.
Y ahora esta crisis del agua, donde la autoridad “nos ha advertido que es necesario un involucramiento mayor en infraestructura, la cual es otro duro golpe de nueva cuenta al sector que se encuentra muy desgastado económicamente, sumado a la falta de incentivos que ayuden a financiar y sortear esta situación”, añadió el líder de los restauranteros.
Imagen portada: Roberto Alanís | MILENIO