Por Daniela Pacheco
La Internacional Feminista (IF) reunió en México a más de 200 mujeres políticas de izquierda feministas de 30 países del mundo que buscan la articulación entre los distintos feminismos, pero no cualquiera: uno antipatriarcal, decolonial, comunitario, de clase, popular, transincluyente, antirracista, antipunitivista, diverso.
El feminismo ha sido la fuerza y la apuesta más transformadora e innovadora de las últimas décadas y esta vez juntó a quienes creen que las mujeres feministas de izquierda tienen que tomar el poder, en el marco de una lucha para combatir las desigualdades del modelo económico y social y hacerle frente colectivamente a los de grupos de derecha, conservadores y neofascistas, sino ¿para qué?
No es lo mismo una mujer política de derecha que se dice feminista, que una mujer politica feminista de izquierda. Las luchas son distintas e incompatibles. Como reza el primer plan de acción de la Internacional Feminista definido en su Encuentro Fundacional: “dejamos claro que cuerpo de mujer no garantiza perspectiva de género”, o mire no más a Dina Boluarte en Perú, responsable de la represión y muerte del pueblo peruano o a personajes como Lilly Téllez en México, defensoras de viejos sistemas opresores y excluyentes.
El avance de las derechas reaccionarias, clasistas, homo y transodiantes, xenófobas, racistas, tiene a los feminismos populares y a sus agendas en el centro de sus ataques. Uno de los puntos más discutidos en las mesas de trabajo de la Internacional Feminista fue la necesidad de “acuerpar” a las mujeres de izquierda en posiciones de poder que defienden proyectos e intereses populares como Cristina Fernández de Kirchner, blancos de la persecución judicial y la violencia política de género.
No hay democracias posibles en sociedades desiguales, por lo que el feminismo popular trabaja por su ampliación y profundización. “Es en la vida y los cuerpos de las mujeres donde se expresan las peores consecuencias del patriarcado, del capitalismo depredador y del colonialismo racista, flagelos que desde un feminismo de izquierda denunciamos y combatimos”, fueron las palabras de la secretaria General de Morena, Citlalli Hernández.
Lejos de los protagonismos, la Internacional Feminista hace un llamado a la comunión de mujeres obreras, sindicalistas, jóvenes, campesinas, migrantes, de la comunidad LGBTI+, indígenas, negras, buscadoras, cuidadoras, académicas, periodistas, integrantes de colectivas, estudiantes.
Siempre han buscado disciplinarnos y esto recién comienza. El Encuentro Fundacional de la IF fue únicamente un punto de partida y de encuentro. Hay lugares de opresión a los que ya no volveremos nunca más.