A finales del 2022 se identificaron 650 fintechs de origen nacional en el ecosistema mexicano, con la capacidad de ofrecer un ‘customer journey’ digital.
Tras la pandemia, los hogares y pequeños negocios comenzaron a tener la necesidad de mayor liquidez para sobrevivir y los bancos tradicionales complicaron aún más el acceso a créditos con el incremento en tasas; señaló MILENIO.
Aquí es donde entran en escena las fintechs, quienes atienden a este mercado descuidado y con grandes carencias.
Las fintechs son una industria que aplica nuevas tecnologías para actividades financieras y de inversión, principalmente acerca este tipo de productos a personas que difícilmente acceden a los mismos, ya sea por falta de recursos o porque no cumple ciertos perfiles de riesgo.
Datos del Banco de México muestran que la emisión de tarjetas viene creciendo a un ritmo de 1.6 por ciento anual entre 2019 a 2022, mientras que información de Finnovista indica que la oferta de empresas fintechs creció en el mismo lapso en 18 por ciento cada año.
“Esta situación de demanda de capital insatisfecha prevalece hoy en día. Aunado a la fuerte inversión en startups de este sector en la región y a la evolución de los KPI’s de las empresas Fintech, es como se aceleró su crecimiento”, detalla en su informe del sector la firma Finnovista. Un ejemplo de este crecimiento es Nubank, que colocó el año pasado 60 por ciento más tarjetas de crédito que BBVA, un total de 3.2 millones de tarjetas de crédito, mientras que el banco tradicional alcanzó 2 millones de esos servicios, esto solo en México; reportó MILENIO.
De acuerdo con Ivan Canales, jefe de operaciones de la empresa digital en el país, del total de clientes que tienen en el país, 79 por ciento se encuentran en zonas rurales, lo que afirma que cada vez son más las personas que buscan inmediatez y pronta respuesta a través de plataformas móviles en términos de herramientas financieras.
Actualmente es más común que la gente se sienta frustrada por la fragmentación financiera que los bancos imponen a muchos procesos de consumo; por ejemplo, la compra de una casa una vez requirió navegar por un mundo confuso de corredores inmobiliarios desconectados, prestamistas hipotecarios, compañías de seguros, abogados, contratistas de renovación.
Canales señaló que 11 por ciento de los mexicanos tienen acceso a una tarjeta de crédito bancaria, “eso está muy por debajo de otros países dentro de Latinoamérica y nosotros creemos que es un problema más de oferta que de demanda y bueno, por el hecho de que somos tan disciplinados en la forma en la que tomamos decisiones crediticias, hemos podido ampliar la oferta a diferentes consumidores que no tienen acceso”.
A finales del 2022 se identificaron 650 fintech en el ecosistema mexicano que reúnen las siguientes características: son empresas de origen nacional, es decir constituidas en el país o con equipo fundador mexicano, operan en México y tienen la capacidad de ofrecer un customer journey digital.
“Este conjunto de empresas constituye lo que denominamos “ecosistema Fintech mexicano”. Ello representa un incremento de 26 por ciento con respecto a las 512 identificadas en 2021. Cabe destacar que se trata de uno de los mayores incrementos interanuales pues prácticamente duplicó el crecimiento registrado entre 2020 y 2021 (16 por ciento).
Actualmente, la banca tradicional se enfrenta a un futuro en el que necesita reestructurarse; sin embargo, los bancos que gestionan con éxito esta transición se volverán más grandes y rentables, al tiempo que conducirán a una oportunidad de creación de valor de hasta 20 mil millones de dólares.
“Cada vez más los procesos tecnológicos van ganando terreno a los procesos burocráticos que puede tener una banca tradicional”, destacó Oliver Babini, fundador y director general de la fintech Day. Aseveró que a pesar de que los bancos llevan siendo el único medio para empresas y consumidores, muchos no están evolucionando sus productos de una manera que coincida con el ritmo de cambio impulsado por la tecnología en otras industrias.
Para competir, de acuerdo con los especialistas de la consultora, la mayoría de los bancos tendrán que adoptar plataformas interindustriales.
“Estas nuevas plataformas desmantelan las barreras entre las industrias tradicionales, remodelando el comportamiento de los clientes y convirtiendo las cadenas de valor anteriormente lineales en ecosistemas que satisfacen las necesidades de los clientes de nuevas maneras”, comentó. De acuerdo con Oliver, la banca tradicional se está dando cuenta que pierden el terreno de servicio al cliente respecto a las fintechs, tratando de crear estos neo bancos digitales ellos mismos, “porque saben perfectamente que este acercamiento con los usuarios es muy valioso”.
Para la consultora Mckinsey, hay quienes señalan que el sector bancario está en un punto de inflexión, y a pesar de los esfuerzos de la empresas financieras tradicionales los márgenes se están reduciendo más de 25 por ciento en los últimos 15 años y se espera que caigan al 30 por ciento, otra disminución del 20 por ciento, en la próxima década.
Sin embargo, Oliver Babini subrayó que aún no es el final de la banca tradicional debido a que las fintechs tienen necesidades financieras bancarias que son solventadas por los bancos.
“Creo que las fintechs vamos a terminar siendo buenos aliados en la última milla de los bancos, por la flexibilidad que le ofrecemos a los usuario”; resaltó MILENIO.
“Los bancos lo entienden bien y es mucho más ágil para ellos, crear infraestructura para las fintechs creando la oportunidad de que seamos nosotros quienes tienen ese frente y ellos únicamente crecer en la parte de infraestructura”, finalizó.