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Por Félix Cortés Camarillo

En el registro de popularidad de las noticias mundiales, la invasión rusa de Ucrania ha pasado a segundo término en el segundo año de existencia, que se cumplió el 23 de febrero. Ya se nos olvidó, o tal vez nunca nos dimos cuenta de ello, que la tragedia de la planta nuclear de Chernobyl tuvo lugar muy cerca de la ciudad de Liov, que a mí me la descubrió alguna escena de las cuatro obras maestras de la dramaturgia de Anton Chéjov; creo que era El Jardín de los Cerezos, pero no estoy seguro.

De lo que sí estoy seguro es que la palabra nuclear siempre ha estado presente en el conflicto que se da trágicamente en los lindes de Europa y Eurasia, en lo que hace muchos años se llamaba la cortina de hierro, con cuyo desplome le privó a la URSS la más importante parte de su territorio. La planta nuclear de Zaporizhya está en medio del fuego cruzado de invasores y defensores y ahí también hay material nuclear. Pero hay más motivos de preocupación.

Entre otros, que Ucrania posee en su territorio, que Vladimir Putin quiere conquistar y meterlo en su cartera, el más rico yacimiento de lo que se llama tierra negra; los agrónomos saben que esa calidad de tierra es por mucho la más generosa para la agricultura. Sus rendimientos multiplican por muchas veces las de otros territorios. Durante decenios, Ucrania fue el granero no solamente de la Unión Soviética suministrándole trigo para su pan y girasol igualmente que soya para sus aceites comestibles; no solamente eso. Los excedentes de esos cultivos ucranianos aportaban al Kremlin importantes divisas por la exportación de alimentos. 

La invasión de Ucrania provocó una crisis alimentaria mundial por la escasez y el encarecimiento siguiente de los cereales. La presión mundial obligó a Rusia a abrir un corredor alimentario de Ucrania a la Crimea que tiene ocupada desde 2014 para permitir el abastecimiento de parte del mundo: el que podía pagar. Ojos negros, Ochychornya, se llama una de las más populares canciones de los rusos y sus soldados, como lo fue de los nazis Lili Marlen en la Segunda Guerra Mundial.

Los bombardeos  de la resistencia ucraniana en contra de los enclaves rusos en los puertos de Odessa y Sebastopol de donde iban los granos ucranios al mundo, con su éxito relativo, llevó a Putin a cerrar ese conducto alimentario. Sin que nadie le pusiera atención al hecho. El precio del trigo y otros cereales ya comenzó a subir en todo el mundo. Muy pronto lo veremos en nuestra tortilla.

O tal vez no.

Los mexicanos tenemos el interés nacional centrado en el drama de los últimos habitantes de la Casa de los Famosos. El resto del mundo se la pasa deleitado con el destino y el mensaje de Barbie.

PARA LA MAÑANERA (Porque no me dejan entrar sin tapabocas): En mi pueblo, que es Nuevo León, ya soltaron el anzuelo chovinista de corral, de que Dante Delgado Ranauro postulará a un neolonés como candidato de Movimiento Ciudadano para la presidencia de la República en 2024. Samuelito el gobernador chiquito o el hijo de Colosio. Es muy probable; así Dante le estaría haciendo a su amigo Lopitos el favor que éste tanto necesita: debilitar a la oposición.

‎felixcortescama@gmail.com

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// Félix Cortés Camarillo

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Autor: lostubos
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