Los invitados de la mesa del programa Cambios coincidieron que existen errores en los libros, algunos graves, pero que se pueden corregir si se consulta con los especialistas, los docentes y los padres de familia.
La polémica por los libros de texto gratuitos para el sistema de educación básica en México llegó a la mesa del programa Cambios, conducido por Víctor Martínez Lucio, y la división de opiniones se hizo presente, con posturas a favor y en contra; resaltó MILENIO.
Para debatir sobre el tema se contó con la presencia de Maribel Sáenz Elizondo, máster en psicología y catedrática de la Universidad Autónoma de Nuevo León, quien señaló que tras leerlos, sintió estar entrando a una nueva era.
“De forma y estructura sí hay cosas que mejorar, pero de contenido me parece que estoy entrando en la nueva era, estoy gratamente sorprendida en unos temas particulares que me hacen sentir que los chicos pronto tendrán otra forma de ver la vida”, dijo.
Así como de July Mendoza García, presidenta de la Unión Neoleonesa de Padres de Familia, quien insistió en que estos libros están hechos en la opacidad, están fuera de la ley y no pueden permitir que lleguen a sus hijos.
“Son libros que están hechos en la opacidad, desde que Max Arriaga anuncia un rediseño de los libros de texto se hace una supuesta consulta a nivel nacional para la elaboración de estos libros de texto.
“Donde se supone que todos íbamos a participar, incluyendo padres de familia, maestros, y jamás se dio a conocer el procedimiento, esa es una de las cosas por las cuales procede el amparo”, indicó.
A decir de Mendoza García, los padres de familia en la entidad consideran que estos libros no aportan en la educación de sus hijos y no están adecuados a la edad de los menores de edad.
“Y a nosotros como padres de familia nos preocupan los primeros prototipos, o lo primero que empieza a salir, con temas que verdaderamente no vemos que abonen a nuestros hijos, que están fuera de la edad evolutiva de los niños.
“Y sobre todo que no están basados en planes y programas vigentes, entonces estamos hablando ahorita de unos libros que, por decirlo de alguna manera, son libros ilegales, que son libros fuera de la ley, por no haber estado en el proceso que exige la Ley General de Educación”, mencionó.
De igual forma se contó con la participación de Jesús Elizondo Salazar, máster en Administración Pública, el cual insistió que el tema es técnico y no debe de politizarse.
“Es muy lamentable que se esté politizando un tema que es de naturaleza técnico, se ha estado diciendo mucho que se va a impartir una educación comunista, que se quiere implementar ideología de género, que a los jóvenes se les está adoctrinando hacia un partido cuando no es así.
“Siempre que hay cambios hay gente que se opone a ellos, ya lo comentó el Presidente hace unos días que se van a revisar los libros, que se va a hacer consultas a los maestros y a todo el ecosistema educativo”, indicó.
Por su parte Alejandro Vázquez Solís, licenciado en Pedagogía y director de la Primaria Cendi #1, recalcó que se falló en la elaboración de estos libros en cumplir con el debido proceso.
“Si nos vamos a otras reformas educativas, errores han existido también y estos mismos al llevarse a la práctica los maestros hacíamos las recomendaciones para la mejora de los mismos y que se corrija a tiempo.
“El debido proceso debería de ser que estos libros entren en contacto con los docentes, con los padres de familia, y tomar acuerdos al respecto, y hacer las correcciones y recomendaciones necesarias”, sostuvo.
En general, coincidieron que existen errores, algunos graves, pero que se pueden corregir si se consulta con los especialistas, los docentes y los padres de familia; informó MILENIO.
