El diputado Félix Rocha, del PAN, dijo que el objetivo es que quienes hayan sido condenados por delitos de violencia no tengan derecho a licencias de portación de armas.
Por unanimidad de votos, el Pleno del Congreso de Nuevo León propuso al Senado de la República una reforma al artículo 26 de la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, a fin de que los hombres que hayan sido condenados por delitos de violencia familiar, feminicidio o cualquier otro contra las mujeres, no tengan derecho a licencias de portación de armas; informó MILENIO.
A propuesta de Félix Rocha, del PAN, se acordó que la portación de armas es un riesgo latente, ya que cuando alguien sabe que algún individuo porta un arma se siente amenazado, motivo por el cual se envió al Senado de la Republica y al Congreso de la Unión el expediente que dio origen para sus efectos constitucionales.
Rocha dijo que la simple presencia de las armas de fuego son una amenaza constante en situaciones de violencia familiar, causando consecuencias graves y generando violencia.
“Es de suma importancia prevenir feminicidios, tentativas de feminicidios, violencia familiar y cualquier tipo de violencia, por lo que, a través de limitar la posibilidad del uso de armas de fuego, que si bien es un tema que abarca los ámbitos internacionales, en los ámbitos nacionales y locales, será de gran avance y beneficio para la sociedad mexicana contar con una legislación que acote cada día más la posibilidad de que un arma de fuego cause daño a una vida más.
“La Fiscalía General de Justicia del Estado informó que en el 2022 se registraron 102 asesinatos, la cifra más alta desde que el feminicidio fue incluido en el código penal estatal y superando en un 65 por ciento a los feminicidios cometidos en el 2021, que cerró con 66. En este año 2023 se han presentado 54”, manifestó.
La disponibilidad de armas de fuego, dijo Rocha, puede aumentar el riesgo de feminicidio de varias maneras, pues la presencia de armas en situaciones de violencia doméstica puede intensificar la gravedad de los ataques y aumentar las posibilidades de un desenlace letal.
Además, en casos de acoso, acecho o situaciones de violencia de género, la presencia de armas puede exacerbar la vulnerabilidad de las mujeres, limitando su capacidad para escapar de situaciones peligrosas.
“Por lo tanto, la presente iniciativa representa una gran importancia, ya que busca la regulación y control de la portación de armas en aras de mitigar el riesgo de feminicidio y promover la seguridad de las mujeres.
“En un intento para prevenir este daño de feminicidios, tentativas de feminicidios y violencia familiar, proponemos que para poder ser acreedor a la licencia de portación de armas de fuego, que expide la Secretaría de Gobernación, los requisitos enumeren la condición de no haber sido condenado por violencia familiar o delitos contra las mujeres”, concluyó.
Imagen portada: Archivo | MILENIO
