Por José Jaime Ruiz
El voto duro de Xóchitl Gálvez no será un voto switch para Jorge Álvarez Máynez, aunque Movimiento Ciudadano debiera aprovechar el descalabro de esta semana negra para la candidata de la oligarquía corrupta. El voto de Xóchitl se mantendrá porque ni siquiera es voto para Gálvez, es contra el presidente Andrés Manuel López Obrador y, por tanto, para la representante de la 4T, Claudia Sheinbaum. Si acaso, ese voto duro puede desencantarse y terminar en pesimismo y, por tanto, en abstencionismo: no hay manera de que Gálvez gane, este arroz ya se coció.
Semana terrible donde el hijo de Xóchitl, Juan Pablo Sánchez Gálvez, le dio la patada final a la candidatura de su madre. Mal timing porque en la víspera del debate Xóchitl se derrumba. En la semana del pre/debate Gálvez está en la lona, puede levantarse, pero en esos términos boxísticos que le agradan, ya perdió por puntos, vengan los rounds que vengan.
No es necesario repetir que Xóchitl no atendió la educación de su hijo, quiere cuidar a los demás y descuidó al suyo, no lo educó para la fraternidad, ya no digamos amor, lo educó para el odio (ahí también está el ejemplo de la prepotencia y el influyentismo del padre). Xóchitl es una borracha, fotografías, imágenes, videos muestran y demuestran su mexicana alegría y, tal vez, ese ejemplo no sea lo central sino la construcción (des) educativa de su hijo como un odiador: clasista, violento, prepotente, misógino… su discurso de odio no es gratuito.
El video de Juan Pablo tiró la candidatura de Xóchitl, lo que no pudo hacer contra Sheinbaum el golpe técnico de la DEA, Tim Golden, Atlas Network, los millones de dólares invertidos en robots con los hashtags de “narcopresidente” y “narcocandidata”, el New York Times, Latinus en contra de los hijos de AMLO, los medios de manipulación coludidos contra la 4T, las firmas de los intelectuales detritus…
Semana terrible para Claudio X./óchitl, tampoco pudieron apropiarse de los programas sociales que, en su momento, votaron en contra y la ejecución de Gisela Gaytán en Celaya los desnudó como lo que son, el ejemplo de Guanajuato como un narcogobierno donde los poderes institucionales dicen gobernar, pero no mandan. Los alaridos de Ciro Gómez Leyva, Carlos Loret de Mola, Leo Zuckermann, Denise Dresser, Fernando Belanzuarán y tantos otros en redes digitales testifican la magnitud de la caída, del derrumbe. Este arroz…
