Costó 66 años años que la prohibición del aborto en Corea del Norte fuera revocada y considerada inconstitucional. Ahora, un Tribunal ordena que antes de 2020, se modifique la ley de 1953 para la interrupción voluntaria del embarazo.
El aborto sólo era permisible para casos de violación, incesto o riesgo para la madre, de no ser así, las mujeres podrían pasar un año de cárcel y pagar una multa, además los médicos que practicaban las interrupciones podían ser condenados a dos años de prisión.
Con siete votos a favor y dos en contra, el Tribunal Constitucional concluyó que la ley de 1953 de protección a la vida y los valores tradiciones es contraria a la constitución.
“La prohibición del aborto limita el derecho de las mujeres a asumir su propio destino y viola su derecho a la salud al restringir el acceso a procedimientos seguros en el momento oportuno”
Embriones no son seres separados e independientes de la madre
A través de un comunicado, el Tribunal Constitucional detalló que los embriones dependen por completo del cuerpo de la madre para su sobrevivencia y desarrollo, por lo que no puede concluirse que “sean seres vivos separados e independientes”.
La decisión emocionó a mujeres que se reunieron frente a la sede del Tribunal en el centro de Seúl, refiere la AFP.
De acuerdo con una feminista, Bae Bok-ju, la decisión fue resultado de la lucha por los derechos de las propias mujeres a lo largo de muchos años.
El principal argumento a favor de la legalización del aborto es similar al de la mayor parte en el mundo: que las mujeres con menores recursos económicos abortan en peores condiciones sanitarias.
Además, un sondeo realizado en 2018 mostró que una de cada cinco mujeres embarazada ya había recurrido al aborto y sólo un por ciento de estas admitió tener una razón legal para practicárselo.