Por Obed Campos
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Al subrayar que “es necesario que despierten de su letargo” los miembros de las Naciones Unidas, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador llamó a la ONU tomar un papel de más liderazgo para combatir la desigualdad…
Pero antes de que los otros pasajeros del avión comercial en el que regresó a México lo abuchearan cuando abordó la nave y buscaba acomodarse, Vasily Nebenzya, representante ruso ante el Consejo de Seguridad de la ONU, le contestó y bien al mexicano.
El ruso observó que el desarrollo por sí solo no puede garantizar la paz, y la paz no necesariamente puede garantizar el desarrollo.
“Por eso es importante tener en cuenta los vínculos pero también tener muy presentes las distinciones entre estos dos procesos”, recalcó Nebenzya.
AMLO enfatizó en su intervención temprana en Nueva York que la ONU podría ampliar el programa suyo de “Sembrando Vida” en los países centroamericanos como Guatemala, El Salvador y Honduras, así como otras vecindades de bajos recursos.
Porque para el presidente mexicano, “nunca en la historia de esta organización se ha hecho algo realmente sustancial en beneficio de los pobres, pero nunca es tarde para hacer justicia”.
Pero Nebenzya recalcó que : «Ni la Comisión de Consolidación de la Paz ni el Consejo de Seguridad disponen de las herramientas para facilitar la formación de modelos económicos sostenibles e independientes, ni garantizar el intercambio y transferencia de tecnologías”.
Según sus cuentas alegres, López explicó que el objetivo de su proyecto es el de garantizar el derecho a una vida digna a 750 millones de seres humanos que sobreviven con menos de dos dólares al día y propuso tres fuentes de financiamiento: el cobro de una “contribución voluntaria, anual”, de 4 por ciento de sus fortunas a las mil personas más ricas del planeta; una aportación igual o mejor por parte de las mil corporaciones privadas más importantes por su valor en el mercado mundial y también una cooperación del 0.2 por ciento del PIB de cada uno de los países integrantes del llamado “Grupo de los 20”.
Seguramente en su mañanera de hoy miércoles va a salir con triunfalismos, pero es muy difícil ocultar el video que circuló en redes sociales y en el que pasajeros de un vuelo comercial abuchean a AMLO quien abordaba el avión para su regreso a México.
Como tampoco podrá ocultar que México recibió el segundo lugar del premio “Fósil del Día”, en Glasgow, Escocia, en el marco de la Cumbre del Cambio Climático COP26. Este premio lo otorga la red Climate Action Network (CAN), y se le dio al gobierno de México porque la administración de Andrés Manuel López Obrador ha destinado más recursos a los combustibles fósiles, lo cual es un retraso a las políticas para reducir las emisiones de carbono.
