Por Obed Campos
Si algo puede presumir Samuel Alejandro García Sepúlveda de su modelo de gobierno “Mattel”, es que ha salido tan alucinante, que no ha faltado uno que otro lampareado que se lo quiere copiar y, así, gobernar, o vivir la administración pública se ha convertido en una charada en Nuevo León.
Lo digo por Eduardo Leal Buenfil, quien es diputado del PAN, por el distrito 26 de Nuevo León y sueña con algún día llegar a ser alcalde del municipio de Allende.
Verlo mal enfundado en un disfraz de Superman, acompañado de una señorita vestida en el mismo tenor, de verdad que da pena ajena.
En su corta carrera legislativa “Lalo” Leal, como se conoce al joven diputado, se ha destacado no por sus iniciativas de ley, sino por que no ha escatimado gastos para hacer públicos los escándalos con los que ha trepado a la vida pública.
Samuel se disfrazó de Buzz Light Year, hace unos meses para visitar a unos niños en un orfanato… No le faltaron coscorrones al gobernador por tener esos arranques tan poco serios para la investidura.
Pero Leal Buenfil, a quien unas horas antes las feministas corrieron a gritos de una manifestación en la que se exigía resolver la desaparición de Yolanda Martínez Cadena, y de la cual quiso sacar provecho, tal parece que no aprendió la lección en cabeza ajena.
Con esto queda demostrado que el histrionismo necesario para ser payaso, a veces es el mismo que se requiere para ser político… No le hace que se arrastre la dignidad y el apellido.