Por Obed Campos
Vuelvo a usar la frase de mi querida hermana y aguerrida abogada, Flor Campos Guzmán quien, en medio de un amargo e interminable litigio familiar, sacó fuerzas y juventud de su pasado y en pleno elevador del Tribunal Superior de Justicia le dijo en su cara a un corrupto juez: “A los santos se les santifica y a las ratas, como a usted, se les ratifica”.
Ni crea que el juzgador tuvo los arrestos (ni los conqués) para enfrentar a mi hermana y salió del elevador con la cola entre las patas.
Saco a relucir esta anécdota por aquello de que hay 65 tiradores (y tiradoras) a quedarse con el puesto que dejó (no acéfalo) Gustavo Adolfo Gutiérrez Guerrero, quien aceptó como premio de consolación una notaría, muy buen negocio, pero nada que ver con el puesto de Fiscal.
Y digo que la Fiscalía no se quedó acéfala, porque, aunque sea interinamente la ocupa el joven Pedro José Arce Jardón, de tan fina estampa, a quien le han de faltar paredes para colgar los cuadros de tanto título (él sí) que se ha ganado en su carrera.
Pero el caso es que 65 aspirantes para un cargo “tan matado”, “tan sufrido”, “tan sacrificado” suena inexplicable… O será cierto que ser Fiscal de Nuevo León es próspero negocio. Lo pregunto, porque lo ignoro.
Porque este asunto es para extrañar a cualquiera: en medio de la marabunta de tiradores hay uno que al menos cuenta con siete denuncias activas en su contra ¡en la propia Fiscalía! por los presuntos delitos de amenazas e injurias y hasta robo.
Eso es lo que sabemos… que será lo que permanece oculto.
Los maloras del medio también me dijeron que cuando presentó su solicitud, un ex jefe de las Policía Ministerial debió ser invitado a pasar no por el polígrafo, sino por el alcoholímetro, porque así se les vive…
Total, todos y todas tienen derecho a aspirar y a hacer circo. Circo que le cuesta dinero a usted y a mí… Como también, sin tener derecho pleno, el gobierno del estado sale con las tácticas dilatorias de no extender las actas de no antecedentes penales a los interesados, aunque ya lo dijo Aldo Fasci que no es requisito indispensable y para el caso, está la instancia federal.
Era para que el presidente del Sistema Estatal Anticorrupción, (SEA) Enrique Ogaz Díaz, diera el manotazo en el escritorio exigiendo celeridad y justicia, pero no, ya ven que el hombre ha de recordar de dónde salen sus quincenas.
Los más optimistas, mientras tanto, esperan que si esto se libera, después del veto que supuestamente ejercerá el hermoso gobernador Samuel García contra su archirrival Adrián de la Garza, y queden nada más tres personajes (y probablemente “personajas”) de los cuales elegir, el proceso finalice allá por Semana Santa del año que viene, es decir marzo o abril de 2023.
Así que no coma uñas… ni ansias.