Por José Jaime Ruiz
Xóchitl Gálvez, la corrupta. Como siempre, Claudio X. González se equivocó. Claudio pierde todas las elecciones que patrocina contra el presidente constitucional de México, Andrés Manuel López Obrador. La “invención” Xóchitl es desparpajo vocacional, vicario. La nostalgia de haber sido y el dolor de ya no ser. “Algia”, dolor. Lo digno suele devenir en rancio, como el panismo que aupó a Xóchitl Gálvez en Monterrey.
De un pueblito del estado de Hidalgo a Las Lomas, una ruta muy gelatinosa. Muy corruptamente gelatinosa. La invención de Xóchitl Gálvez es lo mejor que le pasa a la Cuarta Transformación. Justificar desde la derecha la corrupción, tiene sonido, pero no sentido. Alejandro Junco, un empresario-periodista miserable, cree que la corrupción es negable.
“1.- ADICIONAL al uso ilegal de información fiscal como arma política, la divulgación de una lista de contratos de las empresas de Xóchitl Gálvez deja claro el extraño concepto que tiene Andrés Manuel López Obrador de la transparencia…
“2.- EN abril, vetó a dos comisionados nombrados por el Senado y dejó inoperante al INAI…
“1.- ESTO ha provocado que, desde entonces, información que debiera ser pública permanezca oculta…
“2.- PERO, eso sí, en el caso de los contratos de una aspirante presidencial de Oposición, AMLO no tiene empacho en violar el secreto fiscal y hacer públicos datos que, por ley, deben ser confidenciales…
“1.- ESPECIALMENTE preocupante resulta que en la lista se incluyan no sólo aquellos contratos firmados con entes públicos, sino que también aparecen los celebrados con particulares…
“2.- EN su afán por menoscabar políticamente a Gálvez, el Presidente afecta también los derechos de terceros difundiendo información de operaciones entre entes privados que no tendrían por qué hacerse públicos…”.
Hasta aquí la cita. La corrupción como secreto fiscal. La confidencialidad de la corrupción. La particularidad como impunidad. Lo privado que tiene que ver con lo público, queriendo ser opaco. En Monterrey la derecha rancia arropó a Xóchitl, un mesianismo barato. O la Mesías con huipil.
La derrota del PRIAN es lo que viene. Morena, por el efecto AMLO, tendrá otra dicha en los votos. Polémico, el gobernador de Nuevo León, Samuel Alejandro García Sepúlveda podrá pescar buena votación en el río revuelto de las próximas elecciones. Xóchitl es una opción para la derecha regia, como lo fue Ricardo Anaya, pero el PAN perdió en Nuevo León. Si es pragmático, Samuel Alejandro, desde su estructura social, participará a favor de Claudia Sheinbaum. Se trata de presente y de futuro.
Personajes cómicos son los que promueve la CIA, desde Ucrania a Centroamérica. Gálvez entra en ese patrón. No hay proyecto de nación, salvo el robo, el saqueo, joder a los pobres y la clase media. Xóchitl divide al PRIAN en Nuevo León. Zeferino Salgado y Francisco Cienfuegos asistirán a sus próximas derrotas. Tigre sin cadena, el gobernador los destrozará.
Los Expedientes Públicos X. pasarán factura, también localmente. En el ejercicio electoral, les recomiendo al PRIAN alejarse de Xóchitl. Gálvez, los hundirá más. Tiene cola que le pisan. Paco y Chefo pudieran rendir armas… o les irá peor. Ahora es tiempo. Después, pues después ya no.
Ni difícil ni simple, las ecuaciones son. En Nuevo León Morena asumirá los votos del PRI y Movimiento Ciudadano sumará los votos del PAN. El PRIAN en nuestro estado dejará de existir. Las ecuaciones son. Los personajes que aplauden a Xóchitl son sepulcro. Los Expedientes Secretos X., no son sólo de Gálvez, son de muchos.